Muchos de los delincuentes liberados en Reino Unido de forma anticipada —entre los que se encuentran agresores sexuales— por el Gobierno de Keir Starmer para «aliviar el hacinamiento» en las cárceles del país serán alojados en hoteles.
Así lo ha asegurado la ministra de Justicia, Shabana Mahmood, durante un debate sobre la capacidad penitenciaria de Reino Unido en la Cámara de los Comunes en el que detalló que su cartera está trabajando con el Ministerio de Vivienda, Comunidades y Gobierno local para entender el impacto que tendrá en el sector de la vivienda la liberación de una cantidad tan grande de prisioneros a la vez.
«Como sucede cada vez que se libera a un preso, el personal de libertad condicional está trabajando arduamente para preparar planes de liberación, incluido el alojamiento permanente y temporal. Si un delincuente corre el riesgo de quedarse sin hogar al ser liberado, se le alojará en un alojamiento comunitario«, detalló Mahmood. «Esperamos proporcionar alojamiento a la mayoría de los infractores utilizando las disposiciones existentes, pero, en caso de que no haya suficientes, he autorizado a los directores de libertad condicional a hacer uso de arreglos alternativos, incluidos hoteles económicos, como medida temporal para los casos que veremos en las próximas semanas», añadió la ministra.
Sólo el martes fueron liberados unos 1.700 reclusos, lo que se suma a los 1.000 presos que están siendo puestos en libertad cada semana.
Preguntada por el diputado conservador Edward Argar sobre si el departamento de Justicia ya se había puesto en contacto con algún hotel específico, la ministra matizó que ha autorizado a los directores de libertad condicional a que tomen esta medida pero, añadió, «en este momento, no es definitivo que sea necesario». Mahmood también agregó que, si finalmente lo es, sería transparente con la Cámara, las autoridades locales y la ciudadanía sobre dónde, cuántos y cuándo los prisioneros serán alojados en los hoteles.
Si el Ministerio de Justicia finalmente utiliza estos alojamientos para los ahora expresos, esto se sumaría al número de hoteles que el Ministerio de Interior ya está utilizando para albergar a inmigrantes ilegales y solicitantes de asilo, lo que ya está costando al contribuyente británico millones de libras al día.
La reincidencia es «inevitable»
Las cifras oficiales indican que en las cárceles de Reino Unido hay en la actualidad 88.521 presos, un número récord hasta el momento.
Está previsto que, en cumplimiento de la medida asumida por el Gobierno laborista, más de 5.500 reclusos sean liberados en los próximos días, mientras que otros cientos saldrán también a la calle en octubre, cuando dé comienzo la segunda etapa del plan.
Esta semana, el Inspector Jefe de Prisiones, Charlie Taylor, ha advertido de los riesgos para la seguridad que el plan del Ejecutivo de Starmer representa. Pese a que ha defendido la iniciativa considerando que «no existe otra opción», ha asegurado que «es inevitable que algunos de estos prisioneros sean devueltos a prisión y es inevitable que algunos de ellos se queden sin hogar«.