Mientras la mayoría de países europeos están dando marcha atrás en sus políticas trans y cada vez defienden más la cautela en todo lo relativo a la transición de género, la Alta Autoridad Sanitaria francesa (Haute Autorité de Santé, HAS) —la máxima autoridad de regulación de las prácticas médicas del país—ha publicado un informe a favor de estas intervenciones, a partir de los 16 años, sin el consentimiento de los padres y con cargo a fondos públicos.
La HAS ha elaborado un documento, que se encuentra en revisión, que trata los pasos que siguen a una solicitud de transición. Esta petición suele atenderse mediante tres tipos de respuestas: prescripción de hormonas «de reafirmación de género», cirugía de «reasignación de género» (por ejemplo, cambio de la apariencia de los órganos sexuales) y «apoyo» para las personas transgénero.
Las recomendaciones que hace la HAS tienen como objetivo la creación de un «servicio público de transición de género», tal y como ha detallado el periodista de Le Figaro Paul Sugy, quien ha descubierto el citado informe. Así, la Autoridad se muestra a favor del reembolso completo del tratamiento, de la transición sin obligación de pasar por una evaluación psicológica y de la supresión de la autoridad parental en caso de que los padres rechacen las solicitudes de transición de los niños menores de edad.
Desde el inicio del «recorrido de transición», la HAS recomienda crear «un entorno acogedor, atento y adaptado a las personas trans», en particular utilizando los nombres y pronombres solicitados por el paciente. Esta solicitud continuará con una entrevista personal que, en ningún caso, consistirá en evaluar la capacidad de toma de decisiones del solicitante.
En cuanto a la prescripción de hormonas, la HAS recomienda «garantizar el acceso a las hormonas que reafirman el género», «reembolsar el coste» de su suministro y permitir que todos los médicos, no sólo los endocrinólogos, las prescriban.
En cuanto a la fase quirúrgica, el informe recomienda que se lleve a cabo «sin demora» tras la solicitud del paciente. Además de las operaciones sobre los genitales, la HAS propone todo un catálogo de «cuidados» y «tratamientos» que se pondrían a disposición de las personas trans, como la «depilación».
Le Figaro desvela que la HAS confió la redacción de este informe a un comité de expertos compuesto casi exclusivamente por militantes de asociaciones transactivistas y profesionales de la salud que han apoyado de forma pública las reivindicaciones de estas asociaciones, o incluso a las propias personas trans. Como señala Sugy, la palabra «prudencia» sólo se utiliza una vez en todo el informe.