El partido del presidente Erdogan reconoce en una carta enviado a jóvenes austriacos asegurando que están colando miles de profesores a las escuelas europeas para difundir el Islam.
Erdogan ha enviado miles de profesores y académicos islámicos a Europa para formar a los jóvenes de origen turco en el Islam. El objetivo de la operación es que los turcos que han emigrado al Viejo Continente o que guardan relación con el país mantengan su lealtad hacia él.
Todo parte de una carta que Ankara ha enviado a varios alumnos de 14 años de dos colegios de Viena, tal y como publica el Kronen Zeitung y recoge Breitbart. El remitente de la misiva es el AKP, partido de Erdogan y que según las últimas encuestas podría perder la mayoría absoluta en las próximas elecciones que se celebran en una semana. ‘’Para que nuestros niños aprendan su lengua nativa, su religión y cultura hemos enviado al extranjero a miles de profesores y académicos religiosos’’.
Tras ver la luz pública, la mayoría de partidos han condenado los mensajes que contienen las cartas. El presidente de los socialdemócratas (SPÖ), Heinrich Himmer, ha dicho que ‘’Erdogan y su partido deberían abandonar las escuelas de Viena y dejar a todos los alumnos en paz de manera inmediata’’. ‘’La carta, en cualquier caso pide a las familias turcas que voten por Erdogan’’, ha añadido.
Desde la derecha alternativa de FPÖ, Johan Gudenus ha hablado de un ‘’escándalo increíble’’ y ha afirmado que las cartas muestran cómo Erdogan considera Viena una provincia más de Turquía.
Tensiones entre Ankara y Turquía
El Gobierno austriaco anunció el pasado viernes acciones contra el «islam político» en ese país, con la expulsión de unos 60 imanes turcos financiados desde el extranjero (Turquía), lo que viola la ley vigente. Además, ordenó el cierre de siete mezquitas, entre ellas una acusada de ser cercana al extremismo nacionalista turco.
«Las sociedades paralelas, el islam político y el extremismo no tienen cabida en Austria», declaró en Viena el canciller conservador Sebastian Kurz.
La decisión se tomó tras una investigación por la aparición de una imágenes en las que un grupo de niños recreaban con uniformes militares -posando incluso como cadáveres amortajados con banderas turcas- la batalla de Galípoli, desarrollada en suelo turco durante la I Guerra Mundial.
Las imágenes desataron una gran debate público en Austria sobre las ideas y los valores que se impartían en algunas mezquitas de la asociación austro-turca ATIB, que cuenta con imanes cuyos sueldos son sufragados por Turquía.
Sobre las mezquitas que se cerrarán en distintos lugares del país -cuatro en Viena, dos en la región de Alta Austria y una en Carintia- pesa la acusación de difundir ideas ultranacionalistas turcas, unidas a una lectura muy radical de los principios islámicos.
ATIB, que cuenta con unos 100.000 miembros, pasa por una asociación muy próxima al islamista Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) del presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
Las amenazas del islamista Erdogan
El presidente turco, en respuesta, advirtió de que la decisión del Gobierno austriaco «puede irse de las manos» y pidió a Occidente que obligue a comportarse al «inexperto» canciller austriaco.
«Hago un llamamiento al canciller austriaco. Eres joven y necesitas experiencia. Comportamientos inexpertos como este te pueden costar caro», advirtió Erdogan en referencia a Sebastian Kurz, que, con 31 años, es uno de los jefes de Gobierno más jóvenes del mundo.
El presidente turco volvió a insistir en que la decisión del Gobierno austriaco puede provocar un conflicto «entre la cruz y la media luna» y pidió a los países occidentales que intervengan.
«También hago este llamamiento a Occidente, especialmente a Alemania. Haz que tu hombre se comporte. De lo contrario, la situación puede escaparse de las manos. Hay medidas que vamos a tomar de acuerdo con nuestra posición. No dejaremos que nuestros 250.000 hermanos sean oprimidos allí», advirtió en relación a los turcos de origen o nacionalidad que viven en Austria.