La líder de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, ha calificado a su país, bajo el mando de Emmanuel Macron, como un régimen «autoritario» y ha señalado que Hungría, bajo el mandato del primer ministro Victor Orbán, es un país más democrático.
«Nuestro país se está convirtiendo en un país autoritario», denunció Le Pen en una entrevista al canal de televisión «LCI» en la que se quejó de las investigaciones abiertas por la Fiscalía contra partidos de oposición como el suyo, por malversación de fondos europeos. «La Hungría de Orbán -afirmó- es mucho más democrática que la Francia de (Emmanuel) Macron» porque en Francia los fiscales «bajo las órdenes del poder político» llevan a cabo registros para acceder al contenido de los ordenadores y los teléfonos de dirigentes de oposición.
Respondía así a las preguntas que se le hacían tras los registros dirigidos este martes por la Fiscalía de París contra sedes de la Francia Insumisa (LFI) y domicilios de algunos de los dirigentes de este movimiento izquierdista, en especial el de su líder, Jean-Luc Mélenchon.
La RN también ha sido objeto de registros en la investigación abierta por la sospecha de que asistentes de sus diputados europeos, pagados como tales por la Eurocámara, se dedicaban en realidad a misiones internas de su formación. Según Le Pen, «todos los partidos políticos tienen asistentes parlamentarios con funciones políticas», y no sólo el suyo.
Para evidenciar que se trata de una práctica extendida, argumentó Le Pen, uno de sus cargos públicos, Sophie Montel, denunció ante la justicia a LFI, lo que ha conducido a la apertura del procedimiento contra el movimiento izquierdista.
Y dijo que si la justicia se ocupa sólo de algunas formaciones políticas es porque hay «un proceso de intimidación» dirigido por el Gobierno, lo que significa que «estamos en plena violación de la separación de poderes».