El líder de esta nueva formación, bautizada como ‘Los Patriotas’, es Florian Philippot, quien fuera número dos de Marine Le Pen y acabase enfrentado con ella por motivos fundamentalmente ideológicos.
Tras las elecciones presidenciales francesas, muchos vaticinaron una escisión en la derecha soberanista que hasta entonces encarnaba – sin fracturas – el Frente Nacional. Así, se especulaba con que Marion Le Pen, social y moralmente más conservadora que su tía Marine, fundase una formación que, además de denunciar las dramáticas consecuencias de la globalización y de la expansión del islam en Europa, propusiese un modelo alternativo al posmoderno. Sin embargo, esta predicción se ha revelado desatinada.
Este domingo, no en vano, se ha presentado en sociedad un nuevo partido político que, al tiempo que aboga por una salida rápida de la Unión Europea, pretende mostrarse más progresista que el Frente Nacional en cuestiones morales. El líder de esta nueva formación, bautizada como ‘Los Patriotas’, es Florian Philippot, quien fuera número dos de Marine Le Pen y acabase enfrentado con ella por motivos fundamentalmente ideológicos.
El primer acto público de ‘Los Patriotas’ ha tenido lugar en Arras, que es la capital del departamento del Paso de Calais. La elección de esta urbe tiene muy poco de casual y mucho de declaración de intenciones: así, Arras, que se halla en el norte industrial de Francia, es un antiguo feudo socialista que en las pasadas elecciones se echó en brazos del Frente Nacional como respuesta al severo castigo económico al que le ha sometido la globalización (con sus deslocalizaciones industriales, su inmigración…).
Por un Frexit rápido
El principal objetivo del partido de Philippot, al menos en el corto plazo, es claro: la salida gala de la Unión Europea y, por tanto, de la moneda única (de acuerdo con él, el Frente Nacional descafeinó su discurso en esta área por motivos electorales). Un paso que presenta como indispensable para alcanzar el propósito a largo plazo, que no es sino que Francia recupere su soberanía y la grandeza pretérita.
En la cuestión migratoria, la posición de ‘Los Patriotas’ también se antoja contundente y similar a la mantenida por el Frente Nacional. Así, ésta se puede resumir en un gran ‘no’: ‘La migración masiva no puede continuar porque está consumiendo, secando, regiones enteras en los países de origen y perjudica a los países de acogida’, ha aseverado Philippot, quien ha aludido, en este sentido, a la necesidad de llegar a un acuerdo con los países africanos para contribuir a su desarrollo económico.
En materia económica, el presidente de ‘Los Patriotas’ ha reivindicado un incremento de un quince por ciento del salario mínimo, una persecución activa de la evasión fiscal, una mejora de las pensiones y una mayor atención del Estado a los ancianos y a los dependientes.
La génesis de esta nueva formación política – con un discurso tan firme en lo que atañe a la lucha contra el globalismo y la inmigración masiva – ha sido acogida con entusiasmo por el exlíder del UKIP, Nigel Farage. De este modo, en un afectuoso vídeo, ha invitado a ‘Los Patriotas’ a perseverar y a confiar en su objetivo, por mucho ‘la gente les diga que es imposible’.
Progresismo moral
‘Los Patriotas’ eluden definirse ideológicamente, pues son conscientes de que calificarse de ‘izquierdas’ o de ‘derechas’ cierra las puertas de la anhelada transversalidad. ‘Queremos reunir lo mejor que ofrece la derecha con lo mejor que ofrece la izquierda para darle a Francia lo mejor’, ha señalado Philippot.
Lo que toma el partido de la izquierda es, sin duda, su visión social y moral. Así, su propósito es mantener una postura más flexible que la del Frente Nacional respecto a cuestiones como el aborto, los vientres de alquiler o el matrimonio homosexual; esto es, una postura más amable para el sistema.
