La Gran Sustitución ha pasado a toda velocidad de ser una teoría de la conspiración a una conspiración confirmada y de ahí a una realidad imparable. Austria es el ejemplo más cercano: en su capital, Viena (dos veces asediada por los turcos a lo largo de la Historia) ya hay más alumnos musulmanes que cristianos, por primera vez en toda su historia. Son datos de la Concejalía de Educación de la ciudad.
Los musulmanes representan ya el 41,2% del total de alumnos, frente a un 34,5% de cristianos en caída libre. Y no es una tendencia que dé visos de remitir, más bien lo contrario, con todo el corolario de violencia escolar y discriminación sexual. El año pasado, la proporción de estudiantes de fe islámica era del 39,4%, pero ahora, por primera vez, ha superado el 40%, según informa el periódico Exxpress.
La proporción de niños católicos romanos es del 17,5% y la de niños ortodoxos es del 14,5%. Los siguientes lugares los ocupan los niños sin ninguna afiliación religiosa (23%), el budismo (0,2%) y el judaísmo (0,1%). Se estima que otras comunidades religiosas representan el 0,9%. En total, la encuesta incluyó a unos 112.600 niños de escuelas primarias, secundarias y especiales, así como de escuelas politécnicas.
Los estudios también revelan que los jóvenes musulmanes en Viena no sólo son, de media, significativamente más religiosos, sino que tienen actitudes cada vez más antitéticas a los valores occidentales, más antisemitas, más hostiles a los homosexuales y a la igualdad entre hombres y mujeres.