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Y ABRIRÁ UNA LÍNEA AÉREA ESTATAL

AMLO copia el modelo chavista: pone al Ejército a manejar tres aeropuertos de México

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Twitter

El presidente México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), promotor del socialismo blando, de plano está calcando paso a paso todas las estrategias de Hugo Chávez, quien sostuvo por mucho su poder al darle al Ejército negocios a granel, para granjearse a los uniformados de alto rango y con ello inhibir un posible golpe de Estado. Y vaya que Chávez sabía de eso, porque él mismo fue un golpista, cuando junto con otros el 4 de febrero de 1992 quiso derrocar al entonces presidente de Venezuela, Carlos Andrés Pérez.

AMLO ha tomado nota de éste y muchos otros sucesos en la triste historia roja de Hispanoamérica, y luego de 18 años en campaña, desde que llegó al poder en 2018, ha querido tener al Ejército de su lado -y no sólo a los militares, sino que ha ido tripulando o destruyendo toda institución autónoma, entre las cuales resalta la extrema ideologización de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), y su intento de acabar con el Instituto Nacional Electoral (INE), para que las elecciones sean operadas entonces, quizá, por la Secretaría de Gobernación, como sucedía antes de 1990-.

La mañana de este lunes 5 de diciembre anunció en su conferencia -que es una copia chavista más, del “Aló Presidente”, propaganda permanente y presencia continua- que una empresa que es manejada por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), sería la que administrará varios aeropuertos, como los de Chetumal, Palenque y Campeche.

Además de que esto no es Constitucional, porque la carta magna mexicana establece que el Ejército sólo debe dedicarse a la seguridad nacional, AMLO sigue insistiendo en impulsar ese supremacismo indigenista que ha hecho suyo, y que no es sino un repudio irracional a la herencia hispánica de todos los mexicanos, y el ponerse de lado de algunos pueblos indígenas (no de todos), buscando construirles una hegemonía revanchista, que sólo genera divisiones, muy en la línea del marxismo posmoderno.

La empresa del Ejército a la que AMLO dará tan espléndidas encomiendas, se llama “Olmeca-Maya-Mexica”, según ha informado el gobierno federal, haciendo alusión a tres de los grupos étnicos más grandes del pasado -histórico y prehispánico- de lo que hoy es México, y menospreciando por ejemplo a otros pueblos, más pequeños, como el de los huicholes, el de los rarámuris, el de los yaquis, el de los tojolabales, el de los chinantecos, entre decenas más.

AMLO siempre del lado de los indígenas, pero eso sí, no de todos, sino sólo de los grupos más dominantes que tenían, dicho sea de paso, sojuzgados a los que los rodeaban, como los aztecas, odiados por todos sus vecinos, a quienes pedían tributos y cuando eran considerados enemigos, tras ser apresados, y sacrificados a algún dios pagano -acaso a Quetzalcóatl-, eran desmembrados y comidos en un plato llamado “pozole” (carne humana en trozos, hervidos con granos de maíz, lechuga, rábanos y orégano).

Eso es el supremacismo indigenista practicado por AMLO, además, claro, de estarse peleando con los españoles (cuando su abuelo era de Cantabria) y con el Papa Francisco, a quienes exige pidan perdón por los destrozos que habrían causado según él, hace 500 años, tanto unos, como la Iglesia. Así de injusta y desequilibrada es la visión, la hermenéutica de la historia, por parte de este marxista posmoderno.

Además AMLO, desde el estado sureño de Campeche, dijo también que se abriría una línea aérea, que supuestamente ayudaría a la aviación mexicana.

“Entonces con la nueva línea, con el manejo de los aeropuertos en un plan integral, seguramente van a haber más viajes, va a bajar el precio del pasaje y, si hace falta, vamos a permitir lo que se llama el cabotaje, que las empresas extranjeras puedan llegar a Cancún, se les permita pasar a Campeche y a la Ciudad de México, o sea, liberar todo lo que tiene que ver con el transporte aéreo”, dijo.

“Va a estar junto a la entrada en funcionamiento del Tren (Maya) y se está haciendo el avalúo sobre la marca de Mexicana para presentar a los trabajadores, tanto activos como jubilados, que ya aceptaron que se pueda entregar la marca a cambio de una recompensa que se va a fijar de acuerdo con un avalúo que ya se está realizando”, advirtió AMLO.

En cuanto al aeropuerto de Ciudad del Carmen, AMLO señaló que será administrado por la Secretaría de Marina, ya que sus elementos «son los encargados de atender todo el mar de Campeche y la zona petrolera de nuestro país».

Sin duda, AMLO aplica esquemas socialistas en México cuando privilegia las empresas paraestatales por encima de fomentar la libre competencia de las empresas privadas. Para él, una forma de mejorar los costos, es que el Estado entre en el mercado, como si eso no costara al erario, como si eso no fuera tomado de los impuestos. Y como si eso fuera eficiente. Probadamente no lo es, es un fracaso.

Así lo dijo, tal cual: «Entonces, con la nueva línea, con el manejo de los aeropuertos ya en un plan integral, seguramente va a haber más viajes, va a bajar el precio del pasaje».

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