La primera votación en la Asamblea de la República portuguesa ha provocado un terremoto político tras el voto en contra de los diputados del partido CHEGA al candidato presentado por la coalición AD (PSD-CDS) para la presidencia de la Mesa.
Previamente, André Ventura había anunciado un acuerdo verbal entre ambos partidos de derecha para respaldar a candidato presidente, José Pedro Aguiar-Branco, y como vicepresidente de la Mesa al diputado de CHEGA Diogo Pacheco de Amorim.
Sin embargo, según afirmó el líder del partido patriota, este cambio de posición se debe a que «diferentes miembros de la coalición AD negaron la existencia de dicho acuerdo» y trataron de humillar a CHEGA, tercera fuerza política en Portugal con 50 diputados. Uno de los dirigentes de AD que dijo que no había pacto fue Nuno Melo. «No hay ningún acuerdo», afirmó este martes.
En declaraciones a los medios de comunicación, André Ventura aprovechó para subrayar que siguen dispuestos a alcanzar un acuerdo para una mayoría de derechas y pidió que cese la actitud «inmadura» de los líderes de AD, que continúan ignorando la necesidad de estabilidad política en Portugal.
De este modo, deja en manos de Luis Montenegro, recientemente elegido como primer ministro portugués, la decisión sobre los pactos: «Tiene que elegir, con CHEGA o con el Partido Socialista».
