Un funcionario del gobierno brasileño ha acusado al Gobierno español liderado por Pedro Sánchez de ser «el principal facilitador» de la salida forzosa de Edmundo González a España tras su victoria en las pasadas elecciones de Venezuela: «Tienen que rendir cuentas por lo sucedido», ha llegado a asegurar en declaraciones exclusivas al diario Financial Times.
Edmundo González, exdiplomático y principal opositor al régimen comunista, salió de Caracas el 7 de septiembre rumbo a España, donde solicitó asilo tras semanas ocultándose para evitar ser detenido. La salida de González ha sido un duro golpe para su movimiento, que había prometido que lo instaurarían como presidente cuando finalizara el mandato de Maduro en enero. Según la oposición, cerca del 80% de las actas de escrutinio demuestran que González fue el verdadero vencedor de las elecciones, una afirmación respaldada por Estados Unidos, pero no por Rusia, China, Irán o Corea del Norte.
A sus 75 años, declaró esta semana que fue presionado a firmar una carta en la que reconocía la victoria de Maduro como requisito para poder abandonar Venezuela. El gobierno venezolano posteriormente publicó fotografías que, según afirman, muestran a González firmando dicho documento dentro de la residencia de la embajada española en Caracas. En la reunión estaban presentes Jorge Rodríguez, principal negociador político de Maduro, su hermana Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, y el embajador español, Ramón Santos.
El Gobierno español ha negado cualquier participación en la coacción de González y defiende que su prioridad fue garantizar la seguridad del líder opositor, quien solicitó asilo en España. Sin embargo, González había permanecido durante casi cinco semanas refugiado en la embajada de los Países Bajos antes de trasladarse a la embajada española en Venezuela, donde fue visitado por los Rodríguez.
Desde Brasil sugieren que Zapatero había discutido el plan de exilio con los hermanos Rodríguez y ayudó a ejecutarlo. Al ser contactado para realizar comentarios por el diario Financial Times, el exmandatario español se ha negado a responder.
