La Fiscalía Nacional de Perú ha abierto la cuarta investigación al presidente comunista Pedro Castillo. Esta vez por estar el primer mandatario presuntamente implicado en manejos irregulares para la adquisición de biodiésel a la empresa Heaven Petroleum Operators S.A a través de la estatal Petroperú.
Esta disposición -al igual que ha ocurrido con las tres anteriores- encabezada por la fiscal de la nación, Patricia Benavides, echa por tierra la decisión de la anterior ocupante de ese cargo, Zoraida Ávalos, quien había señalado en enero pasado que Castillo no sería investigado por delitos de este tipo hasta que no concluyese su mandato presidencial.
Las dos primeras investigaciones a Castillo fueron abiertas, en primer término, por su presunta participación en una mafia que operaba en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones e incurrió en actos de corrupción en el Caso del Puente Tarata y, además, por haber ejercido injerencia indebida en el más reciente proceso de ascensos de las Fuerzas Armadas peruanas.
La más reciente investigación en contra del mandatario izquierdista fue abierta por la fiscal Benavides esta misma semana, y se refiere al presunto encubrimiento que habría protagonizado Castillo con miras a obstaculizar la labor de la policía durante la investigación a familiares suyos también señalados por corrupción. La denuncia de obstrucción de la justicia intentada por Castillo la ha encabezado su propio exministro de Interiores, Mariano González.
