El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha querido reforzar este miércoles ante su par francés, Emmanuel Macron, la imagen de Iberoamérica como «zona de paz», remarcando que su país no está interesado en inmiscuirse en ninguna guerra. «Solo destruyen», ha dicho.
«Brasil está preparado para conquistar mayor autonomía estratégica frente a los enormes desafíos a los que se enfrenta el mundo. No queremos guerra, necesitamos defensa para tener paz. América Latina y del Sur es una zona de paz», ha dicho Lula en su visita junto a Macron a una base marítima en Río de Janeiro.
«Tenemos que preocuparnos de nuestra defensa, la defensa de quienes quieren la paz. Tenemos que preocuparnos por la tranquilidad de 203 millones de brasileños. Hay un proceso de animosidad contra el proceso democrático en este país y en el planeta Tierra», ha dicho el mandatario.
Lula ha señalado que confía en que la renovada relación con Francia sirva para «convivir con la diversidad», sin necesidad de «recurrir a la guerra», en clara alusión a uno de los principales reproches que ha estado recibido Brasil en las reuniones del G20 por su postura hacia Ucrania.
Macron se encuentra en su segundo día de gira oficial por Brasil, donde permanecerá un día más. El presidente francés visitará hasta cinco ciudades.
En las últimas horas, Lula y Macron han anunciado un nuevo plan de inversión valorado en 1.000 millones de euros para la Amazonía, que incluye territorios de la vecina Guayana Francesa, región de ultramar de Francia.
