Se tiene previsto que la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) se reúna la semana próxima para aprobar una resolución que condena la represión ejercida por el régimen del tirano nicaragüense Daniel Ortega contra sus opositores. Sin embargo, la iniciativa ha sido torpedeada en alguna medida por la representación de Brasil en el organismo, que ha buscado introducir reformas en el documento.
De acuerdo al medio Infobae el Gobierno de Lula envió esta semana a la OEA un texto alternativo al que se ha venido trabajando, con miras a suavizar los señalamientos hechos contra Ortega.
De este modo, por ejemplo, la delegación brasileña ha sugerido sustituir el reclamo por el «retorno» de la democracia en el país centroamericano por un petitorio para «fortalecer» la democracia en el mismo.
De igual forma, mientras el texto que pretende aprobarse la semana próxima habla de un estado de «profunda alarma» por la represión que se produce en Nicaragua, el proyecto de texto alternativo propone simplemente «expresar preocupación» por la escalada de la represión en la nación gobernada por el sandinismo.
Brasil también ha pedido que se retiren los llamamientos al régimen nicaragüense a comprometerse con la defensa de los derechos humanos, así como toda referencia al descalabro que han sufrido las libertades en el país desde que en 2018 Ortega decidió redoblar la represión contra sus adversarios.