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EN LOS COMICIOS SECCIONALES DEL 5 DE FEBRERO

Varios candidatos de izquierda a alcaldías ecuatorianas, señalados por sus vínculos con el narcotráfico

El alcalde de la ciudad de Manta (Ecuador), Agustín Intriago. Twitter

Los narco-regímenes se volvieron una realidad sudamericana de la mano del socialismo del siglo XXI. En donde no están en el poder, apuntan a recuperarlo desde las elecciones seccionales, a nivel provincial.

Justamente Ecuador está en la recta final de las elecciones locales. Los ciudadanos deberán elegir sus respectivos alcaldes, concejales y prefectos (gobernadores provinciales). Entre ellos se destacan varios aspirantes que tienen vínculos con el narcotráfico y/o el crimen organizado.

A la cabeza está el bastión del correísmo, Manabí, la provincia más grande del Ecuador. Allí un perseguido por Interpol por sus nexos con el narcotráfico, Leandro Norero, habría lavado dinero con obras públicas. Se lo vincula directamente al alcalde de Manta, Agustín Intriago, quien busca la reelección en el sitio que es el puerto más afluente de la nación sudamericana.

El narco habría lavado dinero con obras públicas

Entre mayo y agosto de 2021, Norero obtuvo dos contratos por un total de $3,5 millones de dólares para la construcción y el asfaltado de vías. Las empresas beneficiarias de los contratos son Avilmat y Coralva. Coralva a su vez transfirió a la constructora brasileña Odebrecht alrededor de 400.000 dólares. No es un dato menor, pues Odebrecht formó parte de una red de corrupción a nivel continental que destapó escándalos por pagos millonarios de sobornos.

Norero fue asesinado en octubre del 2022 durante una de las revueltas carceleras que cobraron la vida de centenares de presos. Pero no sepultó sus lazos con el alcalde. Intriago llegó al poder sin experiencia previa en el sector público. Su vínculo inicial con Norero es por medio de “Argenis R.”, quien fue el representante legal de una empresa constituida por Intriago. Luego “Argenis R.” habría fundado su propia empresa y le vendió sus acciones Norero y su pareja.

También en Manabí habría dinero malhabido del narcolavador ecuatoriano Enrique Portocarrero. Fue detenido en España, cuando se trasladaba hacia el Mundial de Qatar. Se le han trazado nexos con carteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. De acuerdo a la denuncia de los legisladores del país sudamericano, también era “financista de bandas delictivas ecuatorianas, como Los Choneros y Los Gansters”. Junto a su red habrían apoyado a cuatro candidatos, también en la provincia de Esmeraldas. El Frente Parlamentario Anticorrupción presentó denuncias al respecto. Los legisladores de dicha entidad pidieron a la Fiscalía apurar sus investigaciones, dado que las elecciones son el 5 de febrero de 2023.

La provincia más grande también es hogar de Romel Cedeño. Es candidato a la reelección como alcalde de Tosagua. Informes policiales lo vinculan con la construcción de pistas clandestinas en Manabí. Curiosamente llegó al poder con el partido de Gobierno actual. Pero tras revelar su prontuario, entró en la lista socialista para la reelección con Revolución Ciudadana. Cedeño fue procesado por delincuencia organizada.

«Actúa casi como Pablo Escobar»

En la provincia de Esmeraldas, la candidata a la Alcaldía de San Lorenzo Adis Solís, es la candidata de la alianza entre Revolución Ciudadana (del correísmo) y la formación Amigo para la alcaldía del cantón. Este cantón está en la frontera con Colombia. Por lo cual es clave para el narcotráfico. De hecho, allí operaban disidencias del FARC, como el frente Óliver Sinisterra.

Solís formaba parte de una “red de corrupción que entregaba de forma irregular cédulas ecuatorianas a ciudadanos de las FARC y futbolistas”. Así señalan las denuncias de los legisladores del Frente Parlamentario Anticorrupción. Pues antes de ser candidata a la alcaldía, Solís era funcionaria del Registro Civil.

Además, el legislador Fernando Villavicencio destaca que el cuñado de Solís fue capturado con varios kilogramos de cocaína. Lamenta que se presentaron siete denuncias contra la candidata ante la Fiscalía, pero no prosperaron. Una de las denuncias contiene una fotografía que muestra fajos de dinero en efectivo en la vivienda de Solís. Y no es un dato menor que esta dama también trabajó en la Fiscalía.

“Cuando un habitante de San Lorenzo le pide un favor porque le pasó algo, ella actúa casi como Pablo Escobar, y va y le resuelve los problemas”, asegura Villavicencio.

Dentro de la red de operaciones del narcolavador Portocarrero, esmeraldeño de nacimiento, habría controlado los cantones de Atacames, Muisne y Pedernales para el envío de droga. Los empresarios César y “Walter C.”, que operaban bajo su mando, habrían hecho público su apoyo a varios candidatos. Ana Caidedo, candidata a alcalde de Rioverde por Centro Democrático, que es el correísmo tras la ruptura con Lenin Moreno; Miguel Ruiz, candidato a la Alcaldía de Esmeraldas del mismo partido; y Tairon Quintero, candidato a alcalde de Muisne por la Izquierda Democrática.

Según los legisladores, Ruiz es primo de “Kevin Q”., “hombre de confianza” de alias ‘Negro Willy’, cabecilla de Los Tiguerones, otra banda delincuencial.

Normalizar la delincuencia, una herencia correísta

La normalización de la delincuencia y el crimen organizado es herencia del periodo socialista en el país. Dejó como legado a uno de los financistas de obras en el sector público: Leandro Norero, conocido como “El Patrón”. Fue el líder de la banda armada de Los Ñetas. Formó parte del acuerdo de paz que orquestó Rafael Correa entre esa pandilla y los Latin Kings. Existe incluso una foto en la que aparece Norero junto con Ricardo Patiño, entonces ministro de defensa. Fue retratado junto a varios miembros claves del régimen, incluso el propio Correa.

Tanto el presidente Guillermo Lasso como el ministro del Interior, Juan Zapata aseguraron que hay pruebas “contundentes” que se presentarían en las próximas semanas. Aunque aún no las han presentado y las elecciones se aproximan.

Pero justo es decir que, aunque se demuestren las irregularidades de los candidatos, difícilmente se podrán invalidar sus candidaturas. Ya aparecen en las papeletas electorales. Y el Consejo Nacional Electoral (CNE) no tiene un marco legal para combatir el origen ilícito de los aportes de campaña.

Ahora le resta al cuarto poder visibilizar estas irregularidades para que la ciudadanía vote de forma informada. En la última elección presidencial, tanto en la región amazónica fronteriza como en las zonas portuarias, donde más nexos hay con el narcotráfico, más votos obtuvo el socialismo. El Ecuador trabajador, en cambio, no les dio el voto.

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