«Ser es defenderse», RAMIRO DE MAEZTU
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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Cura con monja. La historia se repite

http://germinansgerminabit.blogspot.com.es/2014/10/merce-dels-uns-merce-dels-altres.html

¿Un revival de los años 70? Diríamos que sí. Entonces fueron unas cuantas las uniones oficializadas entre cura y monja. Las íntimas habían sido previas. Ahí están. Unas han durado y otras se han perdido. Y alguna hay todavía que viendo a la ella desde fuera es como para pensar, ¡bendito celibato1Pero ¿quién soy yo para meterme en camas ajenas?

Esta es de las últimos de Filipinas. Ya no habrá muchas más, casi ni pocas más, por una poderosísima razón. No quedan monjas. No digo ya en edad núbil sino incluso ni menopáusicas con algún atractivo. El lamentable y repetido caso de cura con monja se termina. Afortunadamente. Si la traición siempre huele mal cuando es doble, peor.

Quim Carrera por fin se va. Es una buenísima noticia. Hasta el punto de que le agradezco mucho a la exteresiana que se nos lo lleve. Sin duda ha sido,pese a las apariencias, una obra eclesial. El Quim tiene 64 años. Todavía iba a dar guerra. Pues agradezcámoles a la exteresiana que lo haya retirado de la circulación eclesial. Seguramente ha sido el mejor servicio a la Iglesia de su vida.

Llegados a este punto, gozoso, es preciso acordarnos de los valedores del Quim. Los que le sostuvieron, promocionaron, mantuvieron… Vaya hatajo de inútiles cuando no de sinvergüenzas. I´nútiles si no se enteraron de nada, sinvergüenzas si eran conocedores de todo. Y esto último sería lo más probable.

Pues, adiós, Quim. Que lo disfrutes mucho. O algo. En adelante el señor Quim, como dirán allí, ya no será nadie en la Iglesia. Uno más del público si quiere asistir. Cosa por otra parte suya y que a mí me la trae al pairo. No tengo el menor interés en darle la paz. Aunque si fuera el caso se la daría como a otro cualquiera. Lo malo ya no es él sino los que consintieron eso y mucho más.  

En la fotografía le encuentro un notable parecido con un obispo catalán. Tampoco se perdería mucho si ése encontrara en el atardecer de su vida el amor. Que tampoco tiene que ser en casas reales. Ella tiene aspecto de abuela joven.  Aunque sin nietos pasados ni futuros.

Repito: qué sean muy felices. No es necesario que agradezcan mi felicitación. Más bien el agradecimiento es el mío por haberse ido. Dentro eran una vergüenza. Ya si quieren volver como una pareja de laicos perdida en los bancos de una iglesia es cosa suya. Yo no iba a protestar de su presencia.    

 

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