En la parroquia de San Francisco de Sales de Madrid. Salesiana.
El concelebrante principal Don Braulio Rodríguez, arzobispo de Toledo. En su condición de presidente de la Comisión Episcopal de Misiones. Naturalmente concelebraba Don Anastasio Gil García, resònsable de Misiones en la CEE. Concelebraban también varios sacerdotes de la OCSHA. Creo que las siglas responden a Obra de Cooperación Sacerdotal Hispanoamericana. o me apetece perder tiempo en comprobarlo.
La misa fue muy… salesiana. En el templo naturalmente María Auxiliadora y San Juan Bosco. Las imágenes de este grandísimo santo no suelen ser muy afortunadas estéticamente. Ésta tampoco lo era.
Don Braulio estuvo bien. Le he oído homilías mejores pero nada que reprochar a la de hoy. Celebra con dignidad y hoy lo ha hecho una vez más. Le gusta cantar.
Sandokán, el director del programa, y el apodo es cariñoso y admirativo, Sandokán como el León de Damasco fueron mis héroes de juventud, estuvo como siempre. Muy bien. Intervenciones las justas y nada en él de otros colegas que se creen los protagonistas de la misa. Y que nos dan la misa. Es inteligente y sabe cual es su papel.
El público, como en general en toda iglesia salesiana, muy abundante. Y muy mayor. Los salesianos fueron admirables en varias cosas. Por supuesto que en la educación de la juventud. Y en clases menos desfavorecidas. Pero con un plus sobre otras órdenes y congregaciones religiosas. Bastantes de sus alumnos perseveraban en la Iglesia. Y vinculados a los salesianos. Cosa que en marianistas, maristas, jesuitas, lasallianos, agustinos… habían dejado de darse. Pero eso, mérito indudable de los salesianos en una época, se ha perdido también. En la parroquia de San Francisco de sales, jóvenes, los del coro. Y apenas alguno más. Supieron también, cuando les encomendaron parroquias, hacerlas vivas. La de María Auxiliadora de mi Vigo natal era modélica. Abarrotada, con numerosos confesores, actos piadosos… Había por supuesto ancianos pero también personas de mediana edad y jóvenes. Hoy no me parece haber observado eso en San Francisco de Sales. Y los ancianos, si no tienen relevo, se extinguen. Allí no había relevo.
El coro por supuesto guitarrero. Un señor mayor de barbita era el guitarrero mayor. Puedo equivocarme pero le vi aire de salesiano. El Gloria fue espantoso. De lo peor que oí en mi vida. Tampoco el Sanctus fue gran cosa pero menos espeluznante.
La comunión masivamente en la mano. Apenas hubo quien la recibió en la boca. Yo de comuniones sé mucho. En mi parroquia debe haber un cuarenta por ciento en la boca. Allí no llegaría ni al cinco. Creo que se puede recibir dignamente la comunión de una u otra manera, yo tengo clara mi preferencia, pero tan generalizada en la mano me parece teledirigida.
Pues eso es lo que se me ha ocurrido al ver la misa de hoy.