A mí me parece penoso. A Wanderer también.
http://caminante-wanderer.blogspot.com.ar/2014/07/felicitaciones-monsenor.html
Hemos llegado a una situación que eclesialmente me parece penosa. Antes había, como hoy, obispos mejores y peores. Pero eran los obispos. Y mantenían una coherencia doctrinal, moral, pastoral… Ahora son jefes de banderías con varios agravantes. Quienes no son de su bandería les zurran la badana inmisericordemente. Y además sus banderías suelen ser tan escasas que no tienen quienes les defiendan. Con lo que quedan fatal. Como este Taussig.
El Papa le podrá hacer arzobispo de donde quiera y hasta cardenal. Pero tampoco eso va a acallar críticas. El problema no se elimina, más bien se acentúa, porque a un imbécil le hagan archipámpano de las Indias. La solución está precisamente en todo lo contrario. No hacer archipámpanos de las Indias a los imbéciles.
Tomen nota de Taussig. De lo peorcito.