El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha mostrado una vez más indiferencia hacia Pedro Sánchez tras excluirle de una ronda de contactos telefónicos con los principales líderes europeos, inmediatamente después de mantener una conversación con el presidente ruso, Vladímir Putin, para instarle a poner fin a la guerra en Ucrania. Entre los mandatarios a los que Trump sí llamó figuran el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el presidente francés Emmanuel Macron, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el canciller alemán Friedrich Merz y el presidente de Finlandia, Alexander Stubb.
Trump ha detallado que estas comunicaciones se produjeron justo después de su charla con Putin, y que todos los líderes fueron informados al instante de los términos de la conversación. El expresidente también ha afirmado que el Vaticano, con el Papa como intermediario, ha expresado su disposición a acoger futuras negociaciones de paz: «¡Que comience el proceso!», ha exclamado con entusiasmo.
Mientras tanto, durante la reciente cumbre de la Comunidad Política Europea en Tirana, Albania, las cámaras captaron a los jefes de Estado europeos dialogando con Trump a través del teléfono, en compañía de Zelenski. Pedro Sánchez, a pesar de su presencia en la misma reunión, fue visto apartado, sin participar en estos intercambios. Más tarde, en un nuevo acto diplomático, los líderes se reencontraron en la ceremonia religiosa que marcó el inicio del papado de León XIV, cita a la que Sánchez tampoco acudió por encontrarse en Bagdad, participando en la cumbre de la Liga Árabe. Fue el único dirigente europeo en asistir a ese evento.
Este no es el primer episodio en que el jefe del Ejecutivo español queda al margen de decisiones de alto nivel. Ya en 2023, Joe Biden, entonces presidente de Estados Unidos, organizó una videoconferencia con sus homólogos de Francia, Alemania, Italia y Reino Unido para abordar la ofensiva de Hamás contra Israel, sin contar con la presencia de Sánchez. Aquel encuentro se produjo tras el ataque de las Brigadas Al Qassam, el ala más violenta del grupo terrorista palestino, que causó la muerte de más de 1.100 ciudadanos israelíes.