Lo sabemos: un intercambio nuclear, del que cada día parecemos estar más cerca, convertiría en inhabitable nuestro planeta, con lo que el vencedor quedaría tan mal como el perdedor. Pero, ¿qué pasaría si existiera un armamento tan destructivo como el atómico, pero sin radiación?
Es lo que parece haber inventado China, que acaba de probar con éxito una poderosa e innovadora bomba no nuclear de hidrógeno, según informa el South China Morning Post, que describe la enorme bola de fuego, intensa y duradera, que produjo la detonación.
La bomba es obra del Instituto de Investigación 705, filial de la Corporación Estatal de Construcción Naval de China (CSSC). La prueba de la bomba se realizó en tierra y el artículo del diario chino no explora las implicaciones del arma de hidruro de magnesio.
«Las explosiones de gas hidrógeno se encienden con una energía mínima, tienen un amplio alcance explosivo y liberan llamas que se extienden rápidamente hacia afuera y se propagan ampliamente», declaró el equipo de investigación en un artículo revisado por pares publicado por la revista china Journal of Projectiles, Rockets, Missiles and Guidance .
«Esta combinación permite un control preciso de la intensidad de la explosión, logrando fácilmente la destrucción uniforme de objetivos en áreas extensa». Además de este uso, los científicos del Instituto de Investigación 705 también evaluaron el potencial de la bomba en ataques limitados contra objetivos de alto valor.