Pastrana confió en la victoria del candidato Iván Duque -también apoyado por Uribe- en las próximas elecciones presidenciales para recuperar el Estado de Derecho, hacer justicia contra los «criminales» y que la libertad y la democracia perduren.
El expresidente de Colombia Andrés Pastrana reclamó una justicia «pronta, eficaz y reparadora» para las víctimas de las FARC, que cierre heridas, evite revanchas y posibilite una paz estable y duradera, y acusó al presidente Juan Manuel Santos de dejar un «legado de coca y violencia».
Pastrana recogió en la Casa de América de Madrid el premio anual de la Fundación española Villacisneros, concedido en esta ocasión también al expresidente de Colombia Álvaro Uribe, quien excusó su ausencia.
El patronato de la fundación, presidido por Íñigo Gómez-Pineda Goizueta, valoró la «extraordinaria rectitud moral, mérito, valentía y compromiso» de ambos políticos frente a la política del gobierno de Santos en las negociaciones del acuerdo de paz con los «terroristas de las FARC».
Pastrana confió en la victoria del candidato Iván Duque -también apoyado por Uribe- en las próximas elecciones presidenciales para recuperar el Estado de Derecho, hacer justicia contra los «criminales» y que la libertad y la democracia perduren.
Según Pastrana, hay que juzgarlos según el Estado de Derecho, y calificó de «malsana utopía» pensar que se puede cambiar «impunidad por paz».
Si no hay Justicia, avisó, el deseo de venganza «rugirá en las víctimas».
Arremetió contra las FARC y el narcotráfico que favoreció a los guerrilleros y otros grupos ilegales, y recordó emocionado cómo él mismo fue secuestrado por el narcotraficante Pablo Escobar.
Reprochó al presidente Santos, que dejará el poder en 2018, que «de espaldas a la opinión pública» y de manera «inesperada» entablase negociaciones de paz con las FARC, una organización «narcoterrorista».
Lo acusó de «imponer» el acuerdo con las FARC de 2016 a un Congreso «dócil», y que fue avalado por una Corte Constitucional que «inclinó la balanza a favor del Gobierno».
Recordó que los contrarios al acuerdo ganaron el referéndum sobre esta cuestión porque la mayoría comprendió que era una lucha por la libertad y la Justicia, dijo Pastrana.
Pero a pesar de la «voluntad democrática del pueblo», Santos «impuso su malsano acuerdo de paz con las FARC», que «viola» la Constitución y eleva el narcotráfico a la categoría de «delito político».
También permite el acuerdo que los autores de los mayores crímenes de la Historia de Colombia queden «impunes» y puedan ser elegidos senadores, congresistas o presidente de la República.
Además, aseguró Pastrana, responsables de las FARC, ahora transformadas en partido, «mantienen una gran fortuna» a nombre de «testaferros».
No es cierto que reine la paz en Colombia ni haya desaparecido la amenaza terrorista, aseguró, a pesar de haber «sacrificado» la Justicia, ni se está acabando con el narcotráfico ni con los cultivos de coca, subrayó.
Recogió el premio en nombre de Uribe el diplomático Francisco Sanclemente, quien leyó una carta suya.
«Queremos la paz, pero sin impunidad» y la falta de Justicia y arrepentimiento no genera sentimientos de reconciliación, según Uribe.
Asistieron, entre otros, el ministro español del Interior, Juan Ignacio Zoido, quien consideró «merecido» el premio, el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo; el expresidente del Gobierno español José María Aznar, y varios opositores venezolanos.