«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Pekín oculta la muerte de Lui Xiabo, el hombre que se enfrentó al comunismo

La agencia oficial china Xinhua emitió un despacho sobre el fallecimiento de Liu, en el que omite la concesión del Nobel de la Paz en 2010


La comunidad internacional ensalzó hoy la figura del disidente chino y premio nobel de la Paz Liu Xiaobo, fallecido de cáncer bajo custodia policial y cuya muerte fue silenciada por el régimen de Pekín.
Liu, quien llevaba nueve años en prisión y de donde solo salió para ser hospitalizado dada la gravedad de su estado, falleció hoy a los 61 años en un hospital de la ciudad de Shengyang, tras sufrir un fallo multiorgánico a causa de un cáncer hepático, según informaron en un comunicado las autoridades judiciales de Shenyang.
La agencia oficial china Xinhua emitió un despacho sobre el fallecimiento de Liu, en el que omite la concesión del Nobel de la Paz en 2010 y en cambio lo define como un «convicto en 2009 de subversión al poder el Estado».
Liu fue condenado en 2009 a 11 años de cárcel por «incitar a la subversión» tras participar en la redacción de un manifiesto político que pedía reformas democráticas al régimen comunista, como la separación de poderes o la libertad de expresión.
Otros medios oficiales, como los diarios Global Times, Diario del Pueblo o la Radio Internacional de China, no mencionan aún su fallecimiento o ignoran la concesión del premio Nobel de la Paz.
Amigos de Liu Xiaobo y organizaciones de derechos humanos lamentaron el fallecimiento y criticaron al Gobierno chino por mantenerle bajo custodia policial en un hospital y no permitirle salir del país antes de su muerte.
«Ahora podemos mostrar al mundo que China es como la Alemania nazi», afirmó a Efe Hu Jia, activista y amigo del fallecido, en referencia a que Liu Xiaobo es el primer nobel de la Paz que muere bajo custodia desde el fallecimiento en 1938 del pacifista alemán Carl von Ossietzky, encerrado en un campo de concentración por denunciar el rearme alemán.
La presidenta del Comité Nobel, Berit Reiss-Andersen, reaccionó con dureza a la noticia y afirmó que el Gobierno chino tiene «una gran responsabilidad» en la muerte de Liu Xiaobo, y recordó que, al otorgarle el Nobel de la Paz, se distinguió su compromiso y su lucha por la democracia en China.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, lamentó la «trágica muerte» de Liu y pidió al Gobierno chino liberar a su viuda, Liu Xia, del arresto domiciliario en el que se encuentra para que pueda «abandonar China».
«Hoy me uno a aquellos en China y en todo el mundo que lloran la trágica muerte del (ganador del) Premio Nobel de la Paz en 2010, Liu Xiaobo, quien falleció mientras cumplía una larga condena de prisión en China por promover reformas democráticas pacíficas», dijo Tillerson en un comunicado difundido por el Departamento de Estado.
El ministro francés de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, expresó y su «profunda tristeza» por la muerte del intelectual chino y pidió libertad de movimiento para sus allegados.
«He expresado a todos sus familiares y amigos mis condolencias» y Francia, que pidió en varias ocasiones la liberación de Liu, recordó, desea que Pekín «garantice la libertad de movimientos a su esposa, Liu Xia, su familia y sus próximos», indicó.
El primer ministro del Gobierno tibetano en el exilio, Lobsang Sangay, dijo que está con el «corazón roto», tras conocer la noticia de la muerte de Liu.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se declaró «profundamente triste» por el fallecimiento de Liu, pero a diferencia de otros líderes, evitó hacer llamamientos al Gobierno chino sobre la situación de la viuda del intelectual.
La Unión Europea (UE) lamentó el fallecimiento de Liu Xiaobo, y reclamó a las autoridades chinas que al menos dejen a la familia darle el funeral que desea.
En un comunicado conjunto, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y el de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, recordaron las peticiones reiteradas a las autoridades chinas para la liberación del disidente, que había pedido en varias ocasiones viajar al extranjero para tratarse de la enfermedad que sufría.
«En este punto, pedimos a las autoridades chinas que permitan a su viuda, Liu Xia, y su familia, que puedan enterrarlo en el lugar y de la manera que escojan, y que se les permita hacer el duelo en paz», dijeron.
La canciller alemana, Angela Merkel, expresó su pesar por la muerte de Liu, a quien definió como «luchador por la libertad de expresión» y al que Berlín se había ofrecido a tratar de su cáncer terminal en el país.
El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Zeid Ra’ad al Hussein, expresó hoy su profundo dolor por la muerte de Liu Xiaobo, y pidió a las autoridades de Pekín garantías para su esposa.
Human Rights Watch (HRW) criticó hoy la «crueldad» demostrada por el Gobierno chino a raíz de la muerte de Liu Xiabo.
«La última vez que un nobel de la Paz falleció bajo custodia estatal fue en 1938, cuando el pacifista Carl von Ossietzky murió de tuberculosis mientras estaba a disposición de las autoridades en un hospital de la Alemania nazi», afirmó HRW en un comunicado.
Alguna publicidad valiente y la ayuda desinteresada de muchos lectores como tú han hecho posible esta noticia. Conoces nuestra línea editorial, a contracorriente de la ideología dominante y desacomplejadamente comprometida con la dignidad humana, la unidad de España y la identidad de Europa. No es fácil ni es barato sostener un medio de comunicación que beba de estos postulados, siempre contra los más poderosos. Por eso te pedimos que nos ayudes con una aportación, que formes parte de nuestro proyecto, que ayudes a que sigamos incordiando al Poder. Puedes hacerlo de varias maneras, infórmate aquí.

TEMAS |
+ en
.
Fondo newsletter