El Gobierno de Taiwán interpreta los ejercicios militares chinos de esta semana, iniciados tras la polémica visita a la isla de la presidenta de la Cámara de Representantes del Congreso de EEUU, Nancy Pelosi, como un simulacro de una invasión del territorio en lo que sería la consolidación de las históricas ambiciones soberanistas de Pekín.
El Ministerio de Defensa de Taiwán ha iniciado este sábado sus propios ejercicios con un despliegue de patrullas aéreas y buques de guerra tras lanzar avisos durante toda esta pasada noche contra cualquier nueva incursión aérea de China en su zona de seguridad, que comienza más o menos pasada la mitad del Estrecho de Taiwán.
«Se detectaron múltiples barcos del Ejército chino alrededor del Estrecho de Taiwán, algunas han cruzado mediana. Posible ataque simulado contra HVA (activos de alto valor)», ha asegurado el Ministerio en su cuenta de Twitter.
Expertos taiwaneses recuerdan que China ha confirmado que estos ejercicios son, de momento, un ensayo de un «bloqueo, asalto a objetivos marítimos, ataque a objetivos terrestres y control del espacio aéreo» del territorio, tal y como describió en su momento la agencia oficial de noticias china Xinhua.
El profesor de la Universidad de Defensa Nacional, Ma Chen Kun, ha considerado en declaraciones al ‘Taipei Times’ que los simulacros tenían como objetivo demostrar la capacidad del Ejército chino para desplegar armas de precisión para cortar los vínculos de Taiwán con el extranjero y facilitar el desembarco de tropas.
«Si el Ejército chino ejecuta de verdad una invasión de Taiwán, las acciones concretas que va a tomar están todas incluidas en este ejercicio en particular: cortarán los vínculos de Taiwán con el mundo exterior y suprimirán la potencia de fuego de la defensa costera», ha avisado.
Se espera que China realice en las próximas horas simulacros en siete zonas que rodean a Taiwán propiamente dicho, en lugar de las seis que China anunció anteriormente, según la Oficina Marítima y Portuaria de Taiwán en un comunicado recogido por el ‘Taipei Times’.
Los ejercicios chinos han provocado que los barcos comerciales se lo piensen dos veces antes de entrar en Taiwán, ya que la zona de simulacros se encuentra a menos de 15 millas náuticas del puerto de Kaohsiung, en el sur de la isla. Estos ejercicios durarán hasta el 15 de agosto.