De esta manera, Trump va a recuperar el enfoque respecto a política internacional con el que se impuso en las primarias republicanas y en las elecciones presidenciales
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, va a pronunciar este martes una alocución ante Asamblea General de las Naciones Unidas en la que, tal y como han señalado funcionarios de la Casa Blanca, enfatizará la importancia de la soberanía nacional como base para la cooperación internacional y comentará la amenaza que suponen los regímenes norcoreano e iraní.
De esta manera, Trump va a recuperar el enfoque respecto a política internacional con el que se impuso en las primarias republicanas y en las elecciones presidenciales. Un enfoque que, en los últimos meses, ha sido sustituido por uno de cariz más globalista, más proclive a disolver los Estados-Nación progresivamente en instituciones supranacionales. No en vano, se ha incrementado la presencia norteamericana en Afganistán y algunos funcionarios de la Administración están tratando de torpedear la salida de Estados Unidos de los Acuerdos de París sobre el cambio climático.
Tal y como ha asegurado un funcionario de la Casa Blanca, Trump no se limitará a defender el ‘América Primero’, sino que también apelará a la soberanía nacional como base para la cooperación internacional. En este sentido, Trump abogará porque no ‘se promueva un modelo de burocracia global, sino el Estado-Nación como mejor instrumento para la elevación de la condición humana’.
En esta línea, el asesor de seguridad nacional norteamericano, H.R McMaster, indicó el viernes, en una rueda de prensa, que la alocución del presidente ante la Asamblea de la ONU versaría fundamentalmente sobre la cuestión de la soberanía: ‘La soberanía y la rendición de cuentas son los más esenciales fundamentos de la paz y la prosperidad. Estados Unidos respeta la soberanía de otros países, espera que los otros hagan lo mismo e impele a los Gobiernos a rendir cuentas a sus ciudadanos’.
El republicano podría utilizar sus palabras ante la Asamblea de la ONU para reconciliarse con ese sector de su electorado que está descontento como consecuencia de las promesas incumplidas en las áreas de política migratoria y exterior, en las que la Administración ha asumido, de forma casi íntegra, los dogmas globalistas.
Los desafíos iraní y norcoreano
El presidente norteamericano también se va a referir a los desafíos que hogaño desvelan a la comunidad internacional, entre los que va a destacar las capacidades nucleares de Irán y Corea del Norte, dos enemigos declarados de Estados Unidos. A este respecto, va a conminar a a los países a actuar de modo conjunto y a fijar unos objetivos y procedimientos compartidos.
Recordemos que el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó la pasada semana, a propuesta de Estados Unidos, una serie de sanciones contra Corea del Norte; sanciones cuyo propósito es disuadir al régimen comunista de continuar violando la legislación internacional con sus pruebas balísticas.
