«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Vicepresidente Primero Acción Política de VOX. Jefe de la Delegación de Vox en el Parlamento Europeo. Abogado del Estado
Vicepresidente Primero Acción Política de VOX. Jefe de la Delegación de Vox en el Parlamento Europeo. Abogado del Estado

No engañes

2 de agosto de 2022

Hace unos días escribía en La Gaceta al respecto de tener y manifestar una opinión propia sobre cualquier cosa, la inmediatez de lo periodístico o informativo y la sustancial diferencia entre la opinión y la posición al respecto de los hechos políticos.

No se debe mentir en ningún caso, pero en política la mentira, el engaño, el fraude consciente debería ser gravemente penalizado

Hoy, si me lo permiten, expondremos otra cara de la moneda: la buena política no puede ni debe mentir. En realidad, no se debe mentir en ningún caso, pero en política la mentira, el engaño, el fraude consciente debería ser gravemente penalizado. Y es constante, por desgracia, la treta, el ardid y el artificio en los partidos políticos. Especialmente en los dos grandes. Muy especialmente en el socialista, donde mentir se ha elevado ya a categoría de argumentario; y es más difícil encontrar en el PSOE una posición clara, firme y sostenida en el tiempo sobre cualquier asunto, que hallar la farsa y la simulación: desde su “De entrada NO” a la OTAN hasta el fraude electoral de noviembre de 2019, un reguero de mentiras y contramentiras en todas las cuestiones. La mentira como arma revolucionaria; eso sí lo tienen muy aprendido. ¡Pero qué revolución más miserable aquella que nace del engaño y la fullería!

He leído esta mañana a un dirigente del PP diciendo que quizás hay que alargar la vida útil de las nucleares e incluso recuperar el carbón. Pero no ha pedido perdón por haber contribuido al desmantelamiento de la red de centrales

He leído esta mañana a un dirigente – de los que ahora brillan rutilantes – del PP diciendo que quizás hay que alargar la vida útil de las nucleares e incluso recuperar el carbón. Pero no ha pedido perdón por haber contribuido al desmantelamiento de la red de centrales térmicas de carbón ejecutada sistemáticamente por Sánchez – que en esto no ha hecho sino continuar las políticas del lobby ecoradical que había ya ejecutado el Gobierno de Rajoy y sus comunidades – o por no haber ya diseñado, programado y garantizado normativamente un plan de prolongación de la vida útil de nuestras nucleares.

Falta a la verdad el citado dirigente. Lo hace conscientemente. Repite, sin creérselo, un par de frases del posicionamiento político de VOX, único partido con representación parlamentaria que ha defendido en décadas la exigencia de la soberanía energética de la Nación, desde mucho antes de que llegase la emergencia energética y la hiperinflación; porque sabe que sus votantes quieren oírlo. Pero, por otro lado, sabe que su partido ni ha estado ni está en eso. Prefieren el pacto, la componenda, el chalaneo, la sumisión al todopoderoso lobby del fanatismo climático, ideológico y financiero. En Bruselas, sus compañeros, ya les dirán lo que tienen que hacer.

El PP en Bruselas ha sido uno de los firmes puntales de Úrsula Von der Leyen, de su misma internacional política, en la promoción y aprobación del llamado Pacto Verde Europeo, origen, fundamento y causa de los males más recientes en materia energética y económica.

En política la mentira es engaño y fraude. A ti mismo. Y al pueblo español, que es el llamado a tomar las decisiones.

El PP en Bruselas votó a favor, aquel fatídico 24 de junio de 2021, de la llamada Ley Europea del Clima, pilar esencial del pacto verde, y luego en otras decenas de votaciones en las que lo del Acuerdo de París, la Agenda globalista 2030, la descarbonificación y el sólo renovables sin nuclear se ha repetido hasta la zafiedad. El mismo PP que se abstuvo un mes antes a la Ley de Cambio Climático de Sánchez, dejando solo a VOX en la defensa de la soberanía energética y minera de España.

No está bien el ardid. Y en política la mentira es engaño y fraude. A ti mismo. Y al pueblo español, que es el llamado a tomar las decisiones. Por eso, la mera opinión no entra en lo político; porque las opiniones son tan volubles como el viento.

En política, te posicionas, y defiendes la posición hasta el final frente al adversario. Como un soldado de los viejos Tercios.

Y si por un no sé qué te ves obligado a cambiar de posición, hazlo con decisión, pide perdón si has causado daño, no engañes, y de nuevo, fija posición y defiéndela.

.
Fondo newsletter