El Cónclave que comienza este miércoles elegirá al nuevo Papa, sucesor de San Pedro y Vicario de Cristo, y aunque algunos purpurados resuenan con más fuerza en las quinielas no hay que olvidar la premisa que se suele escuchar en estas citas de que «Quien entra Papa, sale cardenal».
-Fumata negra tras la primera votación en el Cónclave para elegir al nuevo Papa.
-Miles de personas se han congregado este miércoles en los alrededores de la Plaza de San Pedro. La expectación es máxima incluso aunque se prevé que la fumata sea negra.
-Se cierran las puertas de la Capilla Sixtina. Comienza el aislamiento de los cardenales para elegir al nuevo Papa.
-Comienza el Cónclave para elegir al nuevo Papa con la procesión hacia la Capilla Sixtina.
El decano del Colegio Cardenalicio pide que sea elegido el Papa que la Iglesia y la humanidad «necesitan en este momento de la historia tan difícil y complejo»
El decano del Colegio Cardenalicio, el cardenal Re, ha sido el encargado de celebrar la ‘Misa Pro eligendo Romano Pontifice’. «Estamos aquí para invocar el auxilio del Espíritu Santo, para implorar su luz y su fuerza, a fin de que sea elegido el Papa que la Iglesia y la humanidad necesitan en este momento de la historia tan difícil y complejo», ha señalado en la homilía.
Esta tarde tendrá lugar la primera votación del cónclave
Esta tarde tendrá lugar la primera votación del cónclave. La fumata será no antes de las 19.00 (hora de Roma). Probablemente más tarde.
Los cardenales han celebrado la ‘Misa Pro eligendo Pontifice‘. Se trata de una Misa votiva especial, prevista en el Misal Romano, cuya intención es pedir la asistencia del Espíritu Santo para el Colegio Cardenalicio. Las lecturas suelen centrarse en la figura del Buen Pastor y en la misión de guiar a la Iglesia, destacando el papel del Espíritu Santo en la elección del nuevo Papa.
Por la tarde, los cardenales electores se reunirán en la Capilla Paulina. Desde allí, vestidos con hábito coral, avanzarán en procesión hacia la Capilla Sixtina, entonando el himno Veni Creator Spiritus, invocando al Espíritu Santo.
La suspensión de toda comunicación exterior
Durante el cónclave, los cardenales viven en la Domus Sanctae Marthae, dentro del Vaticano. Desde allí sólo salen para ir a votar a la Capilla Sixtina. Se suspende toda comunicación exterior: no hay móviles, internet, ni prensa. Hay médicos de guardia y sacerdotes confesores disponibles, y el personal de cocina y limpieza también está bajo juramento de secreto.
Para elegir Papa, se necesita una mayoría de dos tercios. Si no hay elección, se celebran hasta cuatro votaciones al día (dos por la mañana, dos por la tarde), y tras varias rondas sin resultado se introduce una pausa de oración y reflexión. Sólo en fases finales se limitan las votaciones a los dos cardenales con más apoyos.