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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Los triglicéridos… ¡otro mundo!

En el anterior post, hemos hablado de los ácidos grasos… Pues vamos a complicarlo un poco más: 3 ácidos grasos con alguna cosilla más ¡¡forma los triglicéridos!!

Los triglicéridos son un tipo de grasa que circula por el torrente sanguíneo y está presente en el tejido adiposo. Sirven para almacenar energía y como combustible para los músculos: como todo, es bueno en su justa medida, pero en exceso es perjudicial, especialmente para el el corazón y los vasos sanguíneos. Sabemos si está alto a través de un simple análisis de sangre.

¿Cuándo es necesario comenzar a controlarse? En principio a partir de los 40 años se debe hacer una analítica para valorar los triglicéridos (y colesterol…) a no ser que haya antecedentes de patología cardiovascular previa en un familiar de primer grado, que se recomienda adelantar el control a los 25-30 años.

Se considera normal por debajo de 150 mg/dl, y elevado a partir de 200 mg/dl.

¿Qué eleva los triglicéridos?

En primer lugar puede haber enfermedades que los eleven, como el hipotiroidismo, la pancreatitis, alcoholismo, enfermedades crónicas del hígado,… También el exceso de calorías, claro…

Como este blog se trata de envejecer saludablemente, vamos a promover los hábitos que reducen las posibilidades de que se eleven los triglicéridos. Algunos consejos:

– Restringe el consumo de bebidas alcohólicas. Te recomiendo repasar el post “Alcohol, alcohol,…

– Vigila tu peso, el sobrepeso-obesidad suele relacionarse con triglicéridos elevados

– Comida poco abundante, regular y rica en fibra

– Restringe el consumo de bebidas alcohólicas, debido a que es una de las causas principales que aumentan los triglicéridos.

– Vigila tu peso. Las personas obesas o con sobrepeso suelen tener niveles altos del triglicéridos en sangre.

– Toma comidas poco abundantes, regulares y ricas en fibra. Reduce alimentos con grasas saturadas (ver anterior post), sustituyendo por alimentos ricos en grasas insaturadas, como el pescado azul o los frutos secos y el aceite de oliva.

– Como ya hemos dicho, realiza ejercicio de forma habitual.

alimentos-recomendados

Un abrazo,

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