El expresidente de Estados Unidos Donald Trump prometió al movimiento provida en 2016 el fin de la sentencia «Roe contra Wade» que abrió la puerta a la consideración del aborto como «derecho» si lograba ser presidente.
«Si asignamos otros dos o tal vez tres jueces, eso es realmente lo que sucederá», dijo en una entrevista antes de los comicios en los que venció a la candidata demócrata Hillary Clinton. «Soy provida y nombraré jueces provida», aseveró, antes de agregar que decisiones sobre el aborto regresarían a los estados.
Desde su llegada a la Casa Blanca, Trump, que no se amedrentó a la hora de suspender la financiación federal de la multinacional del aborto, Planned Parenthood, fijó en la defensa del derecho a la vida del no nacido uno de los principales objetivos de su mandato y reiteró que «cada vida humana es un regalo para el mundo».
Así, afirmó que «restaurar una cultura de respeto por lo sagrado de la vida es fundamental para resolver los problemas más urgentes de nuestro país».
Biden tilda de ‘fundamental’ el aborto
Ante la filtración al portal de noticias «Político» en la que el juez Samuel Alito deja claro que la Corte Suprema ha decidido, por cinco votos contra cuatro, revertir la sentencia jurisprudencial de Roe contra Wade, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha señalado en un comunicado que el aborto es «fundamental».
A la espera de saber «si el borrador es auténtico» y viendo la oleada de leyes a favor de la vida promulgadas en estados gobernados por los republicanos, ha subrayado que estarán «listos» cuando se emita cualquier fallo.
«Si la Corte anula Roe, recaerá sobre los funcionarios electos de nuestra nación (…) proteger el derecho de la mujer a elegir. Y recaerá en los votantes elegir a los funcionarios a favor del derecho a decidir este noviembre», ha añadido Biden, en referencia a las elecciones de medio mandato del próximo mes de noviembre.
