La candidata presidencial peruana Keiko Fujimori, del partido Fuerza Popular, ha convocado a su contrincante para la segunda vuelta, Pedro Castillo, de Perú Libre, a debatir este sábado 15 de mayo en Lima frente a la cárcel de mujeres Santa Mónica, centro en el que estuvo recluida preventivamente, en medio de un estancamiento entre ambos candidatos para decidir sobre los debates electorales.
A través de su cuenta de Twitter, Fujimori ha retado a Castillo, afirmando que «lo espero el sábado a las 15.00 horas (hora local). Veremos si se atreve a llegar«. La candidata derechista estuvo recluida en el centro penitenciario Santa Mónica entre octubre de 2018 y abril de 2020 acusada por la Fiscalía de lavado de dinero en el marco del caso ‘Odebrecht’.
Este debate fue planteado inicialmente por Castillo como un desafío a su rival, que aceptó intervenir, aunque posteriormente el candidato de izquierdas ha dado respuestas vagas sobre si finalmente asistirá al encuentro.
Ante tal propuesta, Fujimori ha fustigado a Castillo pidiéndole que «deje esa actitud machista» y «tenga un poco más de respeto por las mujeres». «No puede pretender que yo haga lo que a usted le dé la reverenda gana. El día sábado a las 15.00 horas lo espero para un nuevo debate», ha agregado también a través de Twitter.
Ambos se encuentran en una encrucijada frente a los debates que ha planteado el Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Inicialmente, el ente electoral planteó cuatro encuentros, algo que Perú Libre rechazó, aunque este domingo la prensa local informaba que la formación habría llegado a un acuerdo con el JNE para convocar dos debates.
Esta propuesta, que será planteada a Fuerza Popular, contempla dos debates, uno presidencial y otro en el que intervengan los candidatos a presidente y vicepresidente y miembros de sus equipos técnicos. Estos debates se realizarían los días 23 y 30 de mayo.
Sin embargo, tras conocerse este nuevo plan de debates Fujimori a acusado al JNE de «ceder a los caprichos de Castillo» y «abdicar de su rol frente a un candidato que desprecia la democracia y sus instituciones», recoge ‘El Comercio’.
Castillo y Fujimori se sitúan en polos opuestos del espectro político, lo que ha convertido a esta campaña en una de las más polarizadas de la historia reciente de Perú.
La última encuesta, publicada este lunes, otorga a Castillo un 34,2 por ciento en intención de voto (un punto menos), mientras que Fujimori sumaría nueve puntos, hasta alcanzar el 32 por ciento.
El estudio de CPI y recogido por la prensa peruana señala además que un 18,5 por ciento votará nulo o en blanco, mientras que un 15,3 por ciento se declara indeciso. Castillo es el favorito en todas las regiones menos Lima y Callao.
