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el número de llegadas ha crecido un 48% con respecto a 2020

La invasión migratoria continúa en Almería y aumentan las fugas de ilegales en cuarentena por COVID

Inmigrantes llegados a Almería.
Inmigrantes llegados a Almería.

La provincia de Almería está siendo la más perjudicada de Andalucía, durante las últimas semanas, en cuanto al número de embarcaciones procedentes de la inmigración ilegal.

La presión migratoria en nuestro país continúa en aumento, con un incremento de accesos ilegales superior al 60% con respecto a los datos del pasado año. Aunque la peor parte se la sigue llevando el archipiélago canario, lo cierto es que Andalucía ya superaba al final de semana las 4.800 entradas de ilegales desde enero de 2021.

Por provincias, Almería sigue siendo la más damnificada en cuanto a la invasión migratoria. En el balance anual se registra la llegada de más de 280 embarcaciones y un total de más de 4.000 inmigrantes ilegales.

De hecho, según informan Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, solo en la última semana han llegado más de 400 inmigrantes ilegales a la costa almeriense en más de 40 embarcaciones. A estos datos, según fuentes de JUPOL en Almería, hay que sumar unos 500 inmigrantes ilegales no interceptados por las FCSE, que, por lo tanto, no han seguido el protocolo COVID.

En este sentido, la crisis sanitaria no está suponiendo ningún freno para los que acceden de forma ilegal a España. Es más, la falta de recursos está generando un descontrol al respecto cada vez más preocupante. Según las cifras recogidas por JUPOL en Almería, en las 40 embarcaciones se han detectado un total de 10 positivos por COVID, por lo que ocho embarcaciones han tenido que ser puestas en cuarentena en su totalidad al ser contactos directos. De los inmigrantes en cuarentena en torno a 15 se han fugado en la última semana.

Una situación que sucede con regularidad y constancia y que ha aumentado debido al buen tiempo, que permite más seguridad para realizar las rutas a las embarcaciones irregulares. Así el número de inmigrantes ilegales llegados a la Península y Baleares hasta el 18 de julio creció un 48% respecto al mismo periodo del año pasado según el último balance publicado por ACNUR. Aproximadamente el 70% de dichas llegadas se registran en Almería.

En cuanto a las embarcaciones, algunas son interceptadas por la Guardia Civil en alta mar, sin embargo, debido a la falta de recursos de las FCSE y a las características de las pateras, muchas de ellas de fibra, algunas llegan a tierra sin ser localizadas. Esta semana algunos de los inmigrantes, la gran mayoría procedentes de Argelia y que han llegado hasta las playas de San José sin ser interceptados, se han trasladado directamente a pie hasta la barriada de El Puche, tomada en su mayoría por los inmigrantes ilegales.

Debido a la puesta en marcha del protocolo COVID, la Junta de Andalucía ha puesto a disposición de los inmigrantes ilegales, procedentes de estas embarcaciones, las instalaciones del Albergue de Inturjoven en la capital almeriense, con el objetivo de controlar a aquellos que son puestos en cuarentena. Un mecanismo de control que se ha cuestionado debido a las numerosas fugas que han tenido lugar en la última semana y que permiten a los inmigrantes ilegales marchar al destino previsto.  

Lejos de reaccionar ante la llegada masiva de embarcaciones a la costa almeriense procedentes, en su mayoría, de Argelia, no se toman medidas contundentes por parte de las administraciones, ni se dota a las FCSE de los recursos necesarios para interceptar en su totalidad al número de pateras que invaden las costas de Almería. Esto genera jornadas, como las que han tenido lugar durante el mes de julio, en las que las entradas han aumentado hasta un 45% en sólo cuarenta y ocho horas, accediendo de forma ilegal a través de la costa almeriense hasta 400 inmigrantes en solo dos días.

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