Andrés Manuel López Obrador, ha achacado este lunes a la «efervescencia política» las peticiones realizadas por la oposición a la Organización de Estados Americanos (OEA) de que el organismo vigile su intromisión del presidente en el proceso electoral del 6 de junio.
«Estamos en víspera de las elecciones y desde luego que hablando del tema, esto es normal, no sólo se presenta este fenómeno en México, sino en otros países, cada vez que hay elecciones hay efervescencia política», ha señalado en su rueda de prensa diaria.
De forma paralela, ha asegurado que en México no hay «limitación» ni «censura» si la oposición quiere denunciar asuntos como la presunta intervención en las elecciones ante la OEA.
«Somos libres (…) podemos denunciar, no hay ninguna limitación, no hay censura, prohibido prohibir, y, si se quiere ir a la OEA, a la ONU a cualquier organismo internacional, todos podemos hacerlo«, ha indicado, según ha recogido el diario mexicano ‘El Universal’.
Por otra parte, ha afirmado que deben garantizarse elecciones «limpias y libres» y ha afeado la compra de votos. «Esa era la mala costumbre, eso manchaba el nombre de México», ha lamentado.
Los opositores Partido de Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano denunciaron a López Obrador ante la OEA este domingo, por una presunta intromisión al proceso electoral y violaciones a la ley electoral. Según aseguró el líder del PAN, Marko Cortés, el mandatario es el portavoz «principal» de la campaña morenista (del partido Movimiento Regeneración Nacional) y realiza desde el Palacio Nacional una contra campaña hacia el PAN y la coalición Va por México».
El 6 de junio están en juego más de 21.000 cargos de elección popular, entre ellos 500 diputados federales; 15 cargos de gobernador; 1.063 cargos en congresos locales; 17.000 en ayuntamientos; y más de 1.900 presidencias municipales.