El Gobierno de México ha anunciado este lunes que envío a Perú una delegación encabezada por el secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez, una vez que el mandatario peruano, el comunista Pedro Castillo, pidió «ayuda» a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ante la «difícil situación» que atravesaba por la moción de censura.
«Nos pidió apoyo por toda esa campaña en contra, mediática (…) Fue el secretario de Hacienda a Perú a apoyar en lo que podamos al Gobierno, que está atravesando una «situación difícil», ha explicado el presidente mexicano en rueda de prensa, recoge el diario ‘Expreso’.
Dicha delegación se reunió con Castillo en el Palacio de Gobierno peruano a mediados de la semana pasada y, además de Ramírez, también estaba formada por la subsecretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, y la encargada de proyectos de apoyo a países extranjeros de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Según ha detallado López Obrador, el presidente peruano le transmitió que desde la oposición se le intentó «quitar el sombrero» –complemento característico de Castillo– para que no accediera al con él al Palacio.
Además, el mandatario mexicano ha revelado este lunes que su homólogo peruano tiene que soportar a un sector de la población que «se tapan la nariz» cuando camina por la calle. «Le dije que de eso no te preocupes, tú eres un dirigente surgido del pueblo», ha señalado López Obrador.
El Gobierno de Castillo ha estado marcado casi desde su configuración por diferentes polémicas que han ido salpicado a sus ministros e incluso se ha visto obligado a nombrar a un segundo Gabinete apenas unos meses después de configurar el primero.
Más tarde la oposición llegó a poner en marcha una moción de censura a Castillo por «permanente incapacidad moral», aunque finalmente el Pleno del Congreso no la admitió a debate a no lograr los votos necesarios.
