«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
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LA SONRISA DE GIULIANI SE ENSANCHA

Salvar al Soldado Biden

¿Se acuerdan del General Flynn? Yo les refresco la memoria: fue la primera señal realmente de peso de que no iban a dejar gobernar a Trump, de que iban a por todas. Militar de excelente prestigio, tras las victoria electoral de 2016 Trump lo nombró consejero de Seguridad Nacional. Para cargárselo, denunciaron una conversación que había mantenido con el embajador ruso el 29 de diciembre, cuando quedaba menos de un mes para la toma de posesión. Así que desempolvaron una ley olvidada, la Ley Logan, que prohíbe a los ciudadanos estadounidenses no autorizados negociar con potencias extranjeras en disputas con Estados Unidos, y fue obligado a dimitir.

En otro orden de cosas, el ex asesor de Seguridad Nacional con Obama Ben Rhodes admitió este lunes que Joe Biden ya está manteniendo conversaciones con líderes extranjeros como sI fuera ya presidente de Estados Unidos. Pero nadie le va a denunciar, ¿verdad? Y, menos que nadie, una prensa internacional que habla de él como una adolescente de su ‘crush’, es decir, de la forma más hiperbólica y cursi y sin el menor temor al ridículo.

ABC, por aquello de ser un diario más rancio que la mojama y necesita hacerse perdonar su conservadurismo original -de suyo imborrable-, parece capaz de llegar más lejos que nadie en esto. Saboreen este disparate de titular: ‘Un Oriente Medio sacudido por Trump mira con cautela a Biden’.

Oriente Medio, por decir lo menos, no necesita que nadie lo sacuda, que hay cocteleras menos agitadas. Pero si alguien se ha encargado de mantenerlo en una guerra continua han sido los predecesores de Trump, especialmente desde Bush, y siempre con el belicoso voto fiel del amigo Biden, aunque no es imposible que ya no se acuerde. Y todo lo que ha hecho Trump con Oriente Medio ha sido rebajar la tensión como ningún otro mandatario norteamericano y conseguir que los países árabes reconozcan a Israel, algo que a un presidente demócrata le hubiera valido un palé de Nóbeles de la Paz.

Pero estamos en la Vida de Truman, en un espectáculo realizado primorosamente para nuestro entretenimiento, sin demasiado que ver con la realidad. En la realidad, la cruda realidad, ni Biden es presidente electo ni Harris vicepresidente, las confesiones e indicios de fraude se multiplican, los recuentos continúan y la sonrisa de Rudy Giuliani se ensancha con cada minuto que pasa. ¿Sigue existiendo el Teléfono de la Esperanza? Es para un amigo.

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