A la Unión Europea tampoco le gusta la ‘política’ en ese sentido tumultuoso, y sí, mucho, los mercados, así que un comisario europeo, un tal Öttinger, les ha dicho a los italianos desde la televisión alemana que ya vendrá el mercados a enseñarles cómo hay que votar, ya.
Al dinero no le gustan los cambios en política; le ponen nervioso. En realidad, a las finanzas no les entusiasma la ‘política’ en el sentido que tiene en las democracias, esa cosa tantas veces tumultuosa que perturba con sus ruidosos vaivenes el tranquilo curso de compras y ventas.
Y, de hecho, no son pocos los que, cuando los tribunos de la plebe agitan, se llevan un dedo a los labios y apuntan con el índice de la otra mano a la bolsa, pidiendo silencio no vaya a ser que los mercados se molesten.
Porque los mercados tienen el genio vivo y pronto, como vemos en Italia, donde el presidente de la República, una figura con las competencias de un monarca constitucional, se ha negado a sancionar el gobierno propuesto por la coalición mayoritaria alegando que uno de los ministros propuestos, Paolo Savona, deja intranquilos a los mercados. Y él por su cuenta ha llamado a un ex FMI, Cottarelli, para que forme gobierno por sus santas narices.
Claro que ha hecho un pan con unas tortas, porque los mercados no son idiotas y advierten que eso es montar la mundial, casi el reverso perfecto de la estabilidad, y va a ser peor el remedio que la enfermedad.
A la Unión Europea tampoco le gusta la ‘política’ en ese sentido tumultuoso, y sí, mucho, los mercados, así que un comisario europeo, un tal Öttinger, les ha dicho a los italianos desde la televisión alemana que ya vendrá el mercados a enseñarles cómo hay que votar, ya.
En España las bolsas caen por la moción de censura propuesta por Pedro Sánchez. A la bolsa, la corrupción le importa un ardite, cosas de la política. La bolsa lo que no quiere es lío e incertidumbre, y de la caja que abre Sánchez solo pueden salir lío e incertidumbre.
Es la apertura de los dos diarios de la derechita que, no por casualidad, son los que más tienen que perder si se va Rajoy. Saca ABC un montaje con los tres presuntos ‘mocionadores’, Sánchez, Rivera e Iglesias en un ‘diminuendo’ de alturas, sobre un fondo con un gráfico de la evolución de la bolsa que podría haber dibujado un émulo de Ibáñez, el de Mortadelo.
‘La Bolsa pierde 24.460 millones por el alud de mociones’. No se alarmen los ignaros: ese dinero no se ha ‘perdido’ en el mismo sentido que se pierden las subvenciones a tanta actividad inútil, falsa o perjudicial. El dinero sigue ahí, en manos de alguien, no se ha ido por el desagüe.
En La Razón, ‘Martes negro por la inestabilidad’. Podían haberlo dejado en ‘Martes negro’, porque lo de la inestabilidad va de suyo. Todavía estoy por conocer un ‘crash’ bursátil debido a la estabilidad.
Debajo, una foto del torero Manzanares, al que entrevistan, y que dice: «Me siento animalista». Miren, no voy a hacer comentarios, para qué.
En El País abren con una de esas fotos que se están poniendo tan de moda, de un grupito avanzando por un pasillo hacia el objetivo del fotógrafo, que siempre me recuerdan a un fotograma de Reservoir Dogs. En este caso son Sánchez y su gente.
Su titular de apertura es soso, lo que tampoco es decir mucho, que es muy de El País confundir seriedad con insipidez: ‘Sánchez inicia «contactos de cortesía» sin revelar detalles’. Y nos quedamos como estábamos.
La segunda noticia de la columna de la derecha, ahí, en pequeño, ‘Bélgica investiga como atentado la muerte a tiros de dos policías y un estudiante’. Alguna vez les he hablado del efecto del ‘perro que no ladró’, es decir, cuando los medios ignoran aquello de lo que todo el mundo habla o que nos afecta gravemente a todos. Este es más bien el caso del embotamiento de la sensibilidad en Europa occidental. Lo que hace no mucho abriría todas las portadas pasa hoy sin mucho comentario. Ni lazos, ni ‘jesuis’, ni banderas, ni lágrimas. Valls nos dijo que nos hiciéramos a la idea y nos hemos hecho a la idea.
En El Mundo, el rostro de Sánchez con una mueca -la boca en una curva perfecta con las comisuras hacia abajo, el reverso perfecto de una sonrisa- bastante característica. ‘Torra elige un Govern para salir del 155 y condicionar la moción’.
Ah, sí, esta es otra, muy comentable. Pero lo dejo para otra ocasión, que lo bonito del Trasgo es que sea breve.
