La alineación

El titular de apertura de El País parece el del Marca anunciando la alineación para el Mundial: ‘Calvo, Ábalos, Robles y Borrell, figuras clave del nuevo Gobierno’.
Suponemos que el pichichi en esa lista es Borrell, cuyo nombramiento para Exteriores da así El Mundo: ‘Sánchez ficha a Borrell para compensar sus guiños a la Generalitat’.
Cuentan de los tiempos del gran Imperio Británico de un gobernador inglés que, invitado a entrar en una mezquita, se encontró en un dilema: si entraba calzado, ofendería a sus súbditos musulmanes, y si lo hacía descalzo, los británicos de la colonia y la metrópoli lo verían como una vergonzosa concesión. Así que decidió entrar con una bota en el pie derecho y descalzo del izquierdo, lo que solo consiguió ofender a todos y dejarle como un idiota.

No sé por qué he recordado esta anécdota, pero ahí la dejo.
Al ABC no le alcanza para decidir qué es más noticiable del día de la entrada por la puerta de atrás -es un modo de decir, que en la foto se ve entrando por la todos conocemos- en la Moncloa, así que titula ‘Ni un día de tregua’ que, aunque no dice mucho, puede luego desgranarlo en cómodos sumarios, cuatro.

La Razón también se refiere a los nuevos ministros, pero quizá piense que nombrarlos en titular es nombrar la bicha, con lo que se limita a una frase pasivoagresiva: ‘Sánchez prioriza a ministros de Zapatero frente al «nuevo PSOE» en su Gobierno’. Eso, imaginamos, es malo.

Es bueno, en cambio, lo que titula de segundo plato: ‘La herencia recibida: Rajoy deja el paro en cifras de antes de la crisis’, algo que también destaca El Mundo: ‘Rajoy deja un 26% menos de paro del que encontró’.

Al PNV, el Partido Popular le quita en el Senado el caramelito de 500 millones que le dio en el Congreso y, sorprendentemente, eso tiene muy contentos a los forofos de la derechita. A mí, eso de que el mismo gobierno que mira con lupa el último céntimo que gano prometa 500 millones de nuestro dinero para ganar un puñado de votos y los niegue cuando ya no, me resulta más escandaloso que muchos casos de corrupción puestos en fila.