Francisco Gómez ha sido designado como jefe de gabinete de Iván Redondo, considerado el gurú de Pedro Sánchez y el artífice principal de su desembarco en Moncloa.
Gómez comenzó a trabajar en la firma de Redondo y éste se lo ha decidido llevar como jefe de gabinete a su secretaría de Estado. Pero su relación y afinidad con el PSOE es reciente, ya que en el pasado destinaba gruesos insultos y ataques a Zapatero y todo lo que oliese a su gestión.
El Plural ha recuperado una serie de tuits de Gómez en los que aseguraba, entre otras cosas, que ‘’los últimos ocho años de desgobierno del PSOE se estudiarán como los de mayor miseria moral’’. ‘’Chapuceros’’ o ‘’demasiado han arruinado a España’’ son algunos de los ‘bonitos’ mensajes que el ahora asesor de Sánchez dedicó a su partido.
Estos son algunos otros ejemplos de la opinión que Gómez tiene del PSOE, partido para el que ahora empieza a trabajar y en cuyo Gobierno hay una vicepresidenta de aquella ruinosa época:
Susana Díaz se declara heredera de Zapatero en su toma de posesión. #eSNews vía El Mundo Pues vaya herencia! http://t.co/SAA7Qall93
— Francisco Gómez (@fgloarte) 7 de septiembre de 2013
“@meneame_net: El gilipollas de la semana: Zapatero http://t.co/mqKFO3lD” Vaya, vaya… Cómo están las cosas!
— Francisco Gómez (@fgloarte) 27 de junio de 2012
Zapatero, 60.000€ por charleta http://t.co/AopxnZjHLx Cotizando por encima de sus posibilidades. Una burbuja más! Y habrá quien lo pague!
— Francisco Gómez (@fgloarte) 5 de abril de 2014
Iván Redondo, el artífice de Sánchez
El jefe de Francisco Gómez es el secretario de Estado Iván Redondo, un experto en comunicación política que llevó al poder en el pasado a algunos candidatos cuyas pretensiones parecían imposibles.
Consiguió aupar a Xavier García Albiol a la alcaldía de Badalona, y logró echar al PSOE del poder en Extremadura llevando la campaña de José Antonio Monago.
Pero sus aspiraciones siempre fueron mayores. Siempre quiso recalar en Moncloa y pensó que en 2015 sería su oportunidad, pero finalmente recibió el portazo de las altas esferas de Génova.
Su labor estuvo vinculada al PP hasta la caída de Sánchez como secretario general del PSOE. Fue en ese momento en el que decidió que el líder derrocado podía construir un relato que le devolviese el timón de Ferraz y, finalmente, la presidencia del Gobierno. Iván Redondo logró lo imposible, que Pedro Sánchez se convirtiera en el nuevo presidente del Gobierno.
