El centro educativo ISSEP ha acogido una tertulia presentada por Fernando Villalba, asesor parlamentario, sobre la crisis institucional que sufre la comunidad autónoma de Cataluña desde hace décadas. Una mesa redonda protagonizada por Joan Garriga -diputado autonómico-, Juanjo Aizcorbe -diputado nacional- y Juan Carlos Girauta -futuro eurodiputado-, ha entrado de lleno en los principales motivos que han acelerado este proceso de crispación a la vez que ha presentado algunas de las posibles soluciones para lograr un reencuentro entre todas las partes en los próximos años.
Juan Carlos Girauta ha abierto la tertulia dejando claro que, si queremos ser ayudados por Europa -ante el desafío separatista-, tendremos que mostrar nuestra voluntad: “¿Cómo es posible que, durante tanto tiempo, nadie se haya sacrificado por la unidad de España?”, ha preguntado a los más de cien asistentes para, posteriormente, contar la anécdota de que él expulsó a Convergencia del grupo liberal por su intención de romper la Constitución.
“Si te plantas en Europa con juristas del nivel de Jorge Buxadé, tenemos muchas opciones de acabar ganando. Si lo hacemos con Puigdemont de presidente, a ver quien lo saca de ahí”, ha explicado insistiendo en que los próximos meses serán vitales para el futuro de España.
En la misma línea ha procedido Juanjo Aizcorbe, diputado nacional de VOX. Cargando duramente contra el nacionalismo, ha señalado que se ha convertido en una forma egoísta de manipular la historia con un objetivo: crear la hipotética nación catalana.
“A eso le han sumado el romanticismo del siglo XIX, el cóctel perfecto. Cuando murió Franco, la gente gritaba ‘¡libertad y Estatuto de Autonomía!’, nadie hablaba de independencia”, ha remarcado recordando lo mucho que ha cambiado la región en pocos años. “La verdad, la bondad y la belleza se acumulan en torno a Dios”, ha citado como advertencia a Europa de que, si recupera sus principios, puede volver a ser un gran continente.
Por su parte, Joan Garriga, portavoz de VOX en el Parlamento de Cataluña, ha contado a modo de anécdota el principal motivo por el que se desvinculó del PP: “Mis padres me llevaron a un acto y Daniel Sirera -diputado popular- nos pidió que retirásemos una bandera de España”, ha rememorado indicando que los “complejos” del PP los conoce desde hace tiempo.
“Soy combativo con el PP por sus constantes cesiones al sistema de las autonomías. Cuando nací, el separatismo no llegaba ni al 1%. Ahora estamos cerca del 50%, un auténtico drama”, ha asegurado apenado diciendo que la única forma de alterar esta tendencia es replantear el modelo de Estado e ilegalizar a los partidos separatistas.
También ha destacado que, lejos de ser una formación sectaria, no tienen por costumbre votar no de forma sistemática a todo lo que presenta el nacionalismo, algo que a ellos mismos les sorprende: “Hablamos español o catalán indistintamente, nos mostramos abiertos y eso lo ha visto la sociedad”, ha concluido añadiendo que, de esta formación quienes quedan retratados son ellos.
“¿Qué haríais si Puigdemont volviese a Cataluña durante la campaña?”, ha preguntado Fernando Villalba, alumno de la IV promoción de ISSEP (ya ha abierto el proceso de admisión del quinto curso), asesor parlamentario en Cataluña y moderador de la tertulia, a los tres presentes. Según Girauta, pese a que Europa estaría a favor de que España detuviese de forma cautelar a Puigdemont, el poco interés del Gobierno a hacerlo lo impedirá: “Hay algo previo, que es la voluntad de querer seguir siendo una nación y una democracia. Y esto ya ocurría hace años en el País Vasco”, ha subrayado dejando claro que, pese a todo, a la hora de la verdad no quieren la independencia.
Considera que, a pesar de los mantras repetidos en múltiples ocasiones por el separatismo, Cataluña nunca ha sido un territorio reprimido por el Estado: “Fuimos los más beneficiados económicamente durante el franquismo”.
Para el exdiputado de Ciudadanos, la clave en el ‘viraje’ ideológico de las masas sociales catalanas fue la llegada de Jordi Pujol: “Ha sido un loco muy cuerdo que ha sabido generar riqueza a base de robarnos al resto y ha hecho mucho daño a la nación”.
Durante su intervención, Girauta ha ido subiendo el tono inmiscuyendo a los presentes en la crisis institucional que vive su tierra: “Ahora me vienen a mi recién llegados a decir que yo no soy catalán cuando conozco la lengua y la cultura catalana mucho mejor que ellos. Es todo tremendo”.
Por si fuera poco, y haciendo un balance de las recientes elecciones vascas, ha cargado contra el PP por sus constantes cesiones a quienes se han saltado la ley: “Han jugado siempre en su marco por llegar al poder y ahora su principal preocupación es acabar con VOX. No puede ser”, ha añadido contrariado destacando, como dice el lema, que ‘Sólo queda VOX’.
También se ha acordado de Feijoo, a quien ha criticado duramente por sus palabras en el pasado en relación a la “nación cultural gallega”: “Alguien que dice eso demuestra haber leído muy poco, porque utilizar el término nación es jugar con dinamita”.
Por último, Garriga se ha abierto y ha admitido que su gran decepción política fue José María Aznar: “Expulsó a la Policía Nacional y a la Guardia Civil de Cataluña además de cederles tramos autonómicos de IRPF”. Además, ha resaltado que, a diferencia de Madrid, que acoge a los catalanes sin prejuicios, si vas allí siendo de zonas de España más “patriotas” puedes quedarte con la etiqueta durante más de una década.
Como conclusión, los tres han coincidido en que, citando a Chesterton, la diferencia entre el nacionalismo y el patriotismo es que los primeros odian lo que está en frente y los segundos aman lo que son.
