El certificado de calidad que Francina Armengol expidió en 2020 a favor de Soluciones de gestión, la empresa hoy investigada por corrupción y vinculada al Ministerio de José Luis Ábalos ha impedido que Baleares pueda, por el momento, recuperar el dinero entregado a la trama a cambio de mascarillas defectuosas.
En concreto, ese cargamento de material sanitario que resultó ser inservible supuso a las arcas públicas un gasto de 3,7 millones de euros.
La entonces presidente de la región, ahora presidenta del Congreso de los Diputados, firmó ese documento dos meses después de saber que las mascarillas eran defectuosas y no eran aptas para su uso.
Según detalla este lunes El mundo, ese detalle ha sido determinante para que el actual gobierno autonómico que lidera Marga Prohens (PP) haya dado carpetazo al primer expediente de reclamación. Ahora se ha abierto una segunda vía para tratar de declarar nulo el contrato y rescatar así los fondos públicos.
Ese certificado de calidad emitido por Armengol no sólo omitía que las mascarillas habían sido defectuosas sino que aseguraba por escrito todo lo contrario: que el suministro había sido «satisfactorio» y que no había habido «incidencias».
«El documento de alegaciones de la empresa de las mascarillas, al que ha tenido acceso este diario, se aferra fundamentalmente a ese aval y lo utiliza como arma legal para no devolver el dinero», detalla El mundo.
La empresa investigada en la trama Koldo se escuda en ese certificado y además incide en que que el Gobierno de Armengol no reclamó el dinero hasta que pasaron tres años desde la recepción del pedido. Recalca que, si quería recuperar el dinero, el Ejecutivo autonómico debería haber rechazado el suministro en el plazo de un mes, y no pasados casi tres años, como finalmente ocurrió.
