El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana continúa con el traslado de los controladores de Tarifa Tráfico a la torre de Algeciras a pesar de las críticas.
El Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo en Tarifa, conocido como Tarifa Tráfico, pasará a ser una instalación remota sin personal. La plantilla será traslada al Puerto de Algeciras, lo que conllevará la pérdida de la visión directa de la zona que controlan, además de tener que compartir espacio con los compañeros del CCS Algeciras, lo que también afectará al trabajo que realizan los controladores.
El Estrecho de Gibraltar es una de las zonas con más tránsito marítimo del mundo, con más de 100.000 buques de todo tipo que atraviesan sus aguas anualmente, a los que hay que sumar las embarcaciones que se dedican al narcotráfico y a la inmigración ilegal, lo que convierte esta franja en un auténtico punto caliente de la navegación marítima.
Tener una visión directa del Estrecho, las condiciones meteorológicas y el estado del mar en tiempo real es fundamental para mantener la seguridad y un correcto control de unas aguas con tanto tráfico. Así lo reclaman los controladores que no entienden qué motivos hay detrás de este traslado.
El plan que maneja la empresa pública de Salvamento Marítimo, SASEMAR, es mantener en las instalaciones los radares y el equipo de vigilancia que será controlado remotamente por los trabajadores trasladados. No parece que así se logre un ahorro económico, ya que el ente público deberá seguir gestionando y manteniendo las instalaciones ubicadas en Tarifa.
En total, son 21 controladores marítimos los que serán trasladados a la planta 14 de la torre del puerto de Algeciras. Allí compartirán espacio de trabajo, instalaciones y servicios comunes con los trabajadores de CCS Algeciras. Los dos centros de control realizan tareas diferentes y en zonas diferentes, pero al compartir espacio se sumará todo el ruido de radio de los dos centros. Esto supone un problema, ya que durante una emergencia se necesita de la máxima atención de los controladores y poder transmitir las instrucciones con total claridad.
Los propios trabajadores del CCS Tarifa se han manifestado frente a las puertas de la Dirección de SASEMAR en Madrid en protesta por un traslado que consideran innecesario y sin justificación. Los controladores, que realizan esta labor desde hace 25 años y con reconocimiento a nivel internacional, temen, además, por sus puestos de trabajo. Les preocupa que, tras el traslado, se vaya reduciendo la plantilla y terminen uniendo los dos centros para que se manejen con menos personal, a pesar del riesgo para la navegación que eso conllevaría.
