El número de conductores en el Parque Móvil del Estado ha aumentado un 9% desde que Pedro Sánchez asumió la presidencia en 2018, pasando de 766 chóferes en ese año a 834 en mayo de este año.
Este incremento de 68 empleados ha venido acompañado de la adquisición de nuevos vehículos, muchos de los cuales son eléctricos o híbridos.
Sin embargo, este crecimiento ha coincidido con un aumento de las quejas por parte de los trabajadores, que denuncian un deterioro en sus condiciones laborales. A lo largo de los últimos años, los chóferes han señalado jornadas de hasta 12 horas sin registrar el tiempo de trabajo, la falta de vacaciones y una sobrecarga de horas extra, que aseguran no estar debidamente compensadas. Estas preocupaciones han provocado un malestar generalizado entre los conductores de los vehículos oficiales.
A pesar de las denuncias sobre el exceso de horas de trabajo, el Ministerio de Hacienda, del cual depende el Parque Móvil del Estado, ha informado que no se han certificado horas extraordinarias durante el periodo mencionado.
En cuanto a la evolución del número de conductores, después de una ligera disminución en 2019, cuando la plantilla bajó a 741 empleados, el número volvió a crecer en los años siguientes. En 2020, se contabilizaron 773 conductores, mientras que en 2021 la cifra alcanzó los 758, aumentando de manera considerable en 2022 con 859 chóferes. El número más alto se registró en 2023, con un total de 941, aunque este aumento se debió en gran parte a la contratación temporal de 96 conductores para la presidencia española del Consejo de la Unión Europea.