Una investigación de LA GACETA revela que el Gobierno de Navarra destinó 447.976,80 euros en 2024 a Cruz Roja para asesoramiento en materia de extranjería, un gasto que se suma a las crecientes críticas por la gestión de la inmigración ilegal en España. Este contrato, firmado por el Ejecutivo foral bajo la gestión del departamento de Políticas Migratorias, cubrió un periodo de un año, desde el 1 de noviembre de 2023 hasta el 31 de diciembre de 2024. Mientras tanto, la población extranjera en Navarra no deja de crecer, alimentada por un efecto llamada se ve agravado por políticas que facilitan la llegada y permanencia de inmigrantes ilegales.
El contrato, titulado «asesoramiento en materia de extranjería», llega a una ONG que está a su vez implicada en numerosas en operaciones de traslado de inmigrantes ilegales desde las Islas Canarias a la península. Según datos obtenidos por LA GACETA, sólo durante el primer trimestre de 2025 Cruz Roja ha participado en más de una veintena de vuelos que trasladaron a cientos de inmigrantes ilegales desde el archipiélago canario hasta Madrid, desde donde fueron distribuidos a centros de acogida en toda España (incluyendo Navarra). Operaciones que, coordinadas con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, actúan como un indudable incentivo para la inmigración ilegal.
Este tipo de medidas, lejos de desincentivar las llegadas, actúan como un imán para quienes buscan entrar ilegalmente en Europa. «Cada euro gastado en facilitar la llegada y permanencia de inmigrantes ilegales es un mensaje claro para las mafias y los traficantes: España es un destino fácil», señalan agentes de la Policía Nacional consultados por este medio.
Navarra, un destino en auge para la inmigración
El aumento de la población extranjera en Navarra es innegable. Según datos del Instituto de Estadística de Navarra (Nastat), en 2021 había 73.113 personas de nacionalidad extranjera, el 11% de la población total. Para enero de 2023, esta cifra había crecido a 80.941 (12%), y en 2024, la población de origen extranjero —incluyendo nacionalizados— superó las 128.000 personas, un 18,8% de los 683.525 habitantes de la región.
Los principales países de origen incluyen Marruecos, Colombia, Ecuador y Perú, con un crecimiento notable de inmigrantes africanos. Entre 2012 y 2022, la población de origen africano creció un 29,3%, mientras que la asiática lo hizo un 64,5%. La edad media de los inmigrantes es de 33,9 años frente a los 45 de los españoles, algo que genera presión sobre los servicios sociales, el empleo y la cohesión comunitaria, especialmente en un contexto donde la inmigración ilegal sigue al alza.