El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha señalado que la suspensión de clases este miércoles y viernes en todos los niveles educativos no universitarios en el archipiélago ha sido una decisión adoptada por «prudencia». Esta medida, adoptada por sorpresa por el Ejecutivo canario, ha causado que todos los niños de las islas alarguen su puente, con cinco días sin clase.
«Al final, las temperaturas son altas y se acumulan ya durante mucho tiempo. Tenemos episodios de calima, lo que está produciendo dificultades respiratorias, desmayos o sangrado de nariz», ha declarado este miércoles en una entrevista en el programa Más de Uno de Onda Cero.
«Yo creo que con buen criterio, los técnicos de la Consejería de Educación, escuchados por el propio consejero, de manera prudente tomaron la decisión de suspender las clases hasta que acabe este episodio de calor, que previsiblemente terminará el fin de semana». Unas declaraciones que lo exculpan de la decisión.
«No es una pérdida total de clases, no es un día festivo. Simple y llanamente se desaconseja el movimiento», ha manifestado Clavijo para justificar la decisión. Ésta pilló por sorpresa a otras comunidades autónomas, que también están registrando estas semanas temperaturas máximas de hasta 33 ºC. Es el caso de Extremadura, Castilla-La Mancha y Andalucía, que sin embargo no han decidido suspender las clases y alargar así el puente gracias a la festividad del Pilar.