La Gaceta repasa el dineral gastado por el Govern catalán mientras no tiene dinero para pagar a las farmacias, ni para mantener abiertos hospitales y asilos.
El último dispendio conocido del Govern en su frenético intento de internacionalizar el procés, pese a los portazos que ha recibido hasta la fecha de diferentes líderes mundiales, asciende a 1,8 millones de euros. Este es el dinero despilfarrado en su ‘embajada’ en EE UU, según se desprende de la memoria de la Delegation of Catalonia to the United States of America.
El ‘embajador’, Andrew Davis, se embolsa 114.361 euros -20.000 euros más que Mariano Rajoy-, y el número dos, Xavier Vila, cobra 61.000.
El argumento oficial para mantener esta delegación es la de «facilitar las relaciones, dentro del ámbito y los poderes del Gobierno de Cataluña, con Estados Unidos, Canadá y México». En un primer momento se abrió en Nueva York, pero en la actualidad tiene la sede principal en Washington y mantiene la de la Gran Manzana.
Según recoge esta memoria, en este tiempo los representantes de la Generalitat han mantenido un total de 167 reuniones con funcionarios y representantes políticos estadounidenses. En su mayoría se trata de encuentros del personal de la oficina con alcaldes, congresistas o asistentes de éstos. Artur Mas o Carles Puigdemont apenas han sido recibidos por dirigentes políticos del país.
Hasta el momento, cuenta ya con 11 delegaciones en el exterior, además de la de Madrid. Entre ellas, una en Rabat (Marruecos) y otra en el Vaticano.
Más de 8.200 costó el último viaje de Puigdemont
Ningún político norteamericano recibió al president y al ‘ministro’ del Exterior, Raül Romeva, en su última gira a tierras americanas, que tuvo lugar el pasado marzo. En el periplo, de cinco días, el president pronunció una conferencia en Harvard y trató del futuro político de Cataluña con miembros de think tanks. Y esto costó 8.215 euros a las arcas públicas, según ha reconocido recientemente el propio Govern en una respuesta parlamentaria al PP, alegando que iban diez miembros del Gabinete de Puigdemont. Pinchando aquí puede conocer algunas de las mentiras que allí soltó el president.
El gasto en dietas y manutención de aquel viaje ascendió a 1.868 euros, el destinado a alojamientos a 30.999 y el dedicado a transporte a 55.101. A Esta factura se suma otra de 8.055 euros del viaje de Artur Mas a principios de marzo a la misma universidad americana y a la británica Oxford.
Del 29 de abril al 6 de mayo también estuvo en Estados Unidos el vicepresidente del Govern y consejero de Economía, Oriol Junqueras, supuestamente con el objetivo de “dar a conocer la situación financiera de Cataluña”. Estuvo en Florida, Washington y Nueva York y el coste de la tournée todavía no ha trascendido.
39.000 euros en viajes al extranjero
Los viajes oficiales al extranjero de Puigdemont en 2016 supusieron 39.000 euros, y los del conseller de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, como mínimo a 14.000 euros, según ha asegurado el Govern en respuesta a varias preguntas parlamentarias formuladas por Ciutadans.
Los que se marcó al extranjero el expresidente de la Generalitat Artur Mas entre enero de 2012 y diciembre de 2015 –incluyendo desplazamientos, alojamientos, dietas y comitiva- ascienden a más de 650.000 euros.
El periplo más caro del expresident fue uno realizado a Nueva York en abril de 2015, que duró seis días, con un coste de 107.891 euros. De ellos, 10.578,73 correspondieron a dietas, 44.540 a alojamientos, 51.414 a transportes y 1.357 a «otros gastos». En él, Mas dejó perlas ridículas y sin fundamento, como equiparar el 11-S con la Guerra de Sucesión de 1974.
¿Y qué imagen dan los separatistas en el exterior?
El analista de política internacional y doctor en Historia Contemporánea, Florentino Portero, afirma que Artur Mas da la imagen de «un loquito fanatizado». A Puigdemont lo ve “un monigote colocado por el anterior presidente, que sencillamente sigue un guion que otros han establecido”.
Sobre si España es un socio fiable en el exterior, que para el eurodiputado Enrique Calvet no lo es, Portero responde si hablamos sobre el separatismo “desde fuera se ve con preocupación la evolución de España, como se ve con preocupación la de Bélgica o de Italia”. “El proceso de desintegración de algunos estados europeos es un tema que se ve con mucha preocupación en general en el mundo, y en particular desde Bruselas”, expresa.
Recuerda a Puigdemont que ni Naciones Unidas ni la Unión Europea van a dar alas a este tipo de movimientos, sean italianos, españoles, o belgas, porque lo que se quiere es contener el proceso, no animarlo.
Al igual que el popular catalán Juan Milián, advierte también al president de que lo único que ha internacionalizado es su ridículo. Celebra que los separatistas “no estén ganando imagen» en el exterior, pese a sus esfuerzos y el dineral que se están gastando en intentar internacionalizar el procés.
Además, destaca que Puigdemont está “dañando mucho la imagen de España en el mundo” y que, desde luego, este tipo de cosas “no atrae la inversión internacional, que Cataluña tanto necesita”.
Además, mientras la Generalitat hace estos dispendios no reduce la deuda que asfixia a los catalanes, que han visto duros recortes en Sanidad o Educación. Para pagar a las farmacias catalanas, mantener abiertos hospitales y asilos no hay dinero. Para eso no. El PPC acusa al Govern de malversación de recursos públicos.
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