El exministro de Exteriores da sus recetas sobre cómo acabar con la deriva separatista y cómo abordar los problemas del siglo XXI en una entrevista para Intereconomia Televisión.
Entró en política muy joven como diputado constituyente bajo las siglas de UCD y durante toda su carrera con el Partido Popular se ha convertido en una de las voces más combativas contra el nacionalismo catalán. Sin embargo, sus últimos posicionamientos y su afán por salirse del guión en una etapa en la que imperan los argumentarios le hicieron prever que no volvería a formar parte del Ejecutivo de Mariano Rajoy.
El exministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha sido el último invitado del programa de Intereconomía Televisión ‘Seis Mujeres Sin Piedad’. Una entrevista en la que ha hablado de sus postulados sobre la crisis de Cataluña, de Mariano Rajoy, de las polémicas en las que se ha visto envueltas y también de la presunta corrupción que azota al Partido Popular.
‘No nos ha faltado valor…sino determinación’
El exministro no ha dudado en hacer autocrítica con respecto a la gestión del Gobierno en la deriva separatista. «Espero que mis antepasados no piensen que hemos sido unos traidores. No nos ha faltado valor, sino determinación. No hemos actuado todo lo pronto que se esperaba», ha asegurado insistiendo en que el Ejecutivo tenía que haber actuado después de la consulta que se celebró el pasado 1 de noviembre del 2014.
«Ahí teníamos que haber hecho mucho más. Esa consulta se tenía que haber impedido porque era ilegal y haber abierto un diálogo para ir liberando presión. Espero que a partir del próximo 22 de diciembre sí se haga», ha señalado en referencia a los comicios autonómicos que se celebrarán el próximos día 21.
Unas elecciones en las que el Partido Popular podría ser el partido menos votado tal y como advierten todas las encuestas. Es más, puede que la formación sólo llegara a conseguir siete escaños en el Parlamento catalán.
«Creo que con esos resultados ni Rajoy ni ningún militante puede estar tranquilo. Pero si hay algo que me preocupa es que vuelva a haber un gobierno independentista porque ahondaría en la fractura entre los catalanes. Prefiero que haya un gobierno constitucionalista el día 21 a que me toque la Lotería el día 22″, ha recalcado dejando entrever que sería un mal menor que el PP tuviera malos porcentajes siempre que se pudiera formar un gobierno constitucionalista. «Sería algo histórico», ha añadido.
Aún así, el exministro de Exteriores ha incidido en que se han celebrado las elecciones demasiado pronto. «Queremos reconstruir una España que han destruido (el gobierno de Puigdemont) y convencerles de que estar dentro de España y de la UE es un buen negocio y no nos va a dar tiempo», ha asegurado.
No obstante, sí apoya la iniciativa de llevar a cabo una reforma constitucional. «Fui diputado constituyente y nadie puede negar mi cariño hacia la Carta Magna pero han pasado 40 años. Tenemos que resolver los problemas generacionales», ha subrayado.
‘No existió la operación Margallo’
El exministro de Exteriores también ha explicado cómo se sintió cuando el presidente del Gobierno decidió no contar con él para esta legislatura y se decantó por Alfonso Dastis. “Cuando alguien se espera lo que va a ocurrir no puede sentirse decepcionado. Pero sí sientes un vacío cuando los teléfonos ya no suenan y no tienes que ir al ministerio”.
Sin embargo niega que su nueva situación se deba a la conocida como ‘Operación Margallo”, -los rumores que señalan que él filtró su nombre como sucesor de Mariano Rajoy en la presidencia del Gobierno-. “Es rotundamente falso. En las luchas de partidos yo sólo sirvo como prisionero. Alguien interesadamente y de fuego amigo extendió la idea de que yo quería ser candidato y no es así”, ha insistido.
Con respecto a Alfonso Dastis ha asegurado que tiene un profundo respecto hacia su gestión ya que no ha cambiado las líneas generales de su etapa en el Ministerio aunque sí ha advertido que debería tener más presencia en Cataluña “porque el partido se juega en Europa” y haber sido más firme en todo lo que respecta a Gibraltar aprovechando el Brexit.
El recado a Soraya: ‘Le mandaré mi libro’
El exministro también ha hecho mención a su relación con la vicepresidenta del Gobierno y ha asegurado que sí le felicitará las navidades porque es un “hombre de buena crianza”. Sin embargo, ha añadido que aunque no le daría consejos sí le mandaría su libro dedicado en el que expone” qué tenemos que hacer en este país para abordar los desafíos del siglo XXI.
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