El riesgo por terrorismo en España ha subido cinco posiciones en el ranking de países del mundo con más peligrosidad. Así, mientras en 2022 se encontraba en el número 60 de 163 naciones, en 2023 ascendió hasta el 55, según el último Índice Global de Terrorismo (GTI, por sus siglas en inglés) elaborado desde 2012 por Institute for Economics & Peace y publicado esta semana.
Este índice elabora un promedio ponderado de los últimos cinco años a través de cuatro indicadores: incidentes, muertes, heridos y rehenes provocados por un ataque terrorista. En 2023, GTI señala un incidente y un muerto por terrorismo en España, que corresponde al asesinato yihadista del sacristán Diego Valencia en Algeciras, cuyo primer aniversario se cumplió el pasado 25 de enero.

El estado español se encuentra así por detrás de otras naciones europeas como Alemania (en el puesto 37), Francia (38) o Reino Unido (41), pero por delante de Italia (58), y dentro de los países considerados como de riesgo «muy bajo».
Las muertes provocadas por ataques terroristas aumentaron un 22%
Pese a que el terrorismo había disminuido o se había mantenido estable durante los últimos años, en los últimos 12 meses se ha producido «el mayor aumento porcentual» desde el inicio del GTI. El informe señala que en 2023 se ha intensificado el terrorismo, con un menor número de atentados, cometidos por menos grupos, pero con resultados más letales.
Las muertes provocadas por ataques terroristas aumentaron un 22% en 2023, hasta las 8.352, su nivel más alto desde 2017. Y esto pese a que el número de ataques disminuyó un 22%: desde 4.321 en 2022 hasta 3.350 en el último año.
El epicentro del terrorismo se ha desplazado de Oriente Próximo, a la región del Sahel Central, en el África subsahariana, donde ahora se producen más de la mitad de las muertes por terrorismo. Y en concreto es Burkina Faso la nación que lidera el ranking con 1.907 víctimas mortales, un incremento del 68% en el número de muertes con respecto a 2022.

Por el contrario, las muertes en Afganistán, el país que desde 2019 lideraba esta lista, descendieron un 81% en 2023 hasta las 519.
También descendieron las muertes en Irak, que en este informe ni siquiera aparece entre los diez primeros países con mayor riesgo. En 2023, esta nación registró un 99% menos de muertes y un 90% menos ataques que en 2007, su momento más álgido.
El informe destaca la situación de Israel, que en 2023 sufrió el mayor incremento en el número de muertes por terrorismo, desde 24 en 2022 hasta 1.210, como consecuencia de los ataques de Hamás en el mes de octubre. «Hamás fue el segundo grupo terrorista más mortífero en 2023, responsable de nueve ataques terroristas que resultaron en 1.209 muertos. Casi todas estas muertes se produjeron como consecuencia de los ataques del 7 de octubre, en el que militantes liderados por Hamás llevaron a cabo múltiples incursiones en Israel, ataques con cohetes, asaltos armados y secuestros que resultaron en 1.200 muertes, más de 4.500 heridos y 250 personas tomadas como rehenes. Este ha sido uno de los cuatro únicos ataques terroristas registrados desde 1970 que ha provocado más de 1.000 muertes y el episodio con más muertes en un solo ataque desde el 11-S», incide el informe.
Estado Islámico, el grupo terrorista más mortal
El grupo terrorista Estado Islámico —y sus filiales— continúa siendo por noveno año consecutivo el más mortal en el mundo, pese a que los asesinatos provocados por los yihadistas han descendido un 17% con respecto a 2022 desde las 1.963 hasta las 1.636.
Los cuatro grupos terroristas responsables del mayor número de muertes en 2023 fueron Estado Islámico, Hamás, el Frente de Apoyo para el Islam y los Musulmanes (JNIM, la filial de Al Qaeda en el Sahel) y Al-Shabaab (la filial de Al Qaeda en Somalia). Estos cuatro están detrás del asesinato de 4.443 personas.