El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ya trabaja en promover la candidatura del ministro de Transformación Digital, Óscar López, como reemplazo de Juan Lobato en el liderazgo de los socialistas madrileños. Con el apoyo directo de Pedro Sánchez, López se perfila como la figura de peso que una facción del PSOE-M venía reclamando como secretario general y futuro candidato. En las últimas horas, no ha hecho más que ganar respaldos, vendiéndose como alguien capaz de enfrentar a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Mientras tanto, Juan Lobato ha decidido mantenerse en su puesto a pesar de la controversia generada por su visita a una notaría para certificar información confidencial que Moncloa le envió sobre la pareja de Ayuso. Esta acción podría ser el golpe final a su carrera política, ya que ha generado rechazo tanto dentro como fuera del partido. Fuentes del PSOE-M afirman que «los números ya no le favorecen» y que «si antes tenía pocas posibilidades de ganar, ahora no le queda ninguna».
La dirección nacional del PSOE, ubicada en Ferraz, ha movido sus fichas para que Lobato convoque a la ejecutiva regional y reconozca su falta de apoyo. Sin embargo, han decidido no intensificar la presión en estos días previos al congreso federal, considerando que «no tiene sentido entrar en una confrontación» a tan solo tres días del evento. No existen mecanismos para forzar su dimisión ni para impedir su asistencia al cónclave, por lo que la estrategia se centra en esperar.
Lo crucial ahora, según fuentes socialistas, es que se convoque el congreso autonómico previsto para el 1 y 2 de febrero. Este proceso implica el siguiente calendario: presentación de candidaturas el 7 de diciembre; recogida de avales del 8 al 16; campaña del 19 de diciembre al 10 de enero; votación en primera vuelta el 11 de enero y, si fuera necesaria, una segunda vuelta el 18 de enero.
Estas fechas fueron acordadas por Lobato y Santos Cerdán, aunque el proceso interno aún no es oficial. Se espera que la ejecutiva regional se reúna el próximo lunes 2, y el comité regional, encargado de convocar el congreso, lo haga el 4 y 5 de diciembre. Una vez realizado este trámite, el camino estará completamente despejado para Óscar López. Su llegada es vista como una oportunidad para revitalizar el partido en Madrid, especialmente después de que la incorporación de la exministra de Industria, Reyes Maroto, al Ayuntamiento de Madrid no tuviera el impacto esperado.
Por su parte, Lobato era consciente desde hace meses de que podían impulsar un candidato en su contra, pero creía que la ausencia de una alternativa sólida le permitiría continuar. La situación cambió drásticamente en las últimas 48 horas, desde que el diario Abc reveló su visita al notario, un hecho desconocido incluso dentro del partido. Ferraz ha tratado de hacerle ver su aislamiento, pero sin desencadenar una crisis mayor.
