Las ayudas otorgadas por el Ministerio de Cultura al mundo del cine superan los doscientos veintisiete millones de euros en apenas tres años.
Fernando Trueba, que en 2015 reconoció que no se había sentido español «ni cinco minutos», recibió ayudas por valor de 1,8 millones del Ministerio de Cultura. Conviene recordar que las subvenciones al mundo del cine superan los doscientos veintisiete millones de euros en apenas tres años.
Trueba consiguió por su última película, ‘El artista y la modelo, una ayuda del Ministerio por valor de 721.646,37 euros. Cifras mayores fueron las de «El baile de la victoria», en 2009 (848.383 euros) y «El embrujo de Shanghai», en 2002 (810.820.37 euros), según datos facilitados por el Ministerio de Cultura.
De hecho, la productora del director, Fernando Trueba Producciones Cinematográficas S.A., ha solicitado subvenciones para casi todos los proyectos del cineasta, tuvieran o no perspectivas de recaudación. Por ‘Chico y Rita’ (2010) consiguió un apoyo de 682.124 euros con los que rodó una película de animación que apenas tuvo acogida en taquilla.
Gracias a ‘Belle Époque’, película por la que ganó un Oscar, recibió 50 millones de las antiguas pesetas (unos 300.000 euros), mientras que por ‘Two Much’ tuvo una asignación de cerca de 400.000 euros. El cineasta también recibió subvenciones por documentales de música: ‘Calle 54’ consiguió una subvención de 395.541,47 euros en 2000, mientras que ‘El milagro de Candeal’ (2004) recibió del Estado 385.566 euros.
Las redes sociales han rescatado estas cifras y, tras la polémica ceremonia de los Goya, han censurado las reclamaciones por una mayor cuantía de estas subvenciones públicas:
CIF A28895829 a FERNANDO TRUEBA P.C., S.A. se le concedieron 1.815.514,27€ en 3 subvenciones desde el 12-12-2014 al 24-11-2015
— Absolutexe (@Absolutexe) 5 de febrero de 2018
El polémico discurso
Todo ocurrió durante su discurso tras recibir el Premio Nacional de Cinematografía, un galardón entregado por el ministerio de Educación, Cultura y Deportes y cuyo premio en metálico, 30.000 euros, sí aceptó de buen grado. El dinero no tiene patria, claro.
Al cineasta no parecía preocuparle la crisis económica -las ayudas del Gobierno a su sector son cuantiosas-, la falta de liderazgo político o la deriva del cine patrio. Todo eso a Trueba le importaba, con perdón, un carajo. El director creía “más preocupante” el rebrote del patriotismo que se está produciendo, según él, en España.
“Estoy encantado en España, pero no me gustan los sentimientos obligatorios”, aseguró Trueba, que parecía no comprender que, de la misma manera que él desprecia la bandera y los símbolos nacionales, hay muchos ciudadanos orgullosos de sentirse españoles y que valoran el privilegio que ello supone.
El cineasta continuó su alegato asegurando que en España “ahora todos los españoles, de derechas e izquierdas, están con banderas y eso a mi no me gusta”.
Unas palabras que no causaron sorpresa de alguien que aseguró que “en caso de guerra, yo iría siempre con el enemigo. Qué pena que España ganara la Guerra de Independencia. Me hubiera gustado que ganara Francia. Nunca me he sentido español, ni cinco minutos. Siempre he estado a favor de las selecciones de los otros países, el único año que fui con la selección española fue cuando ganó el Mundial”.
Alguna publicidad valiente y la ayuda desinteresada de muchos lectores como tú han hecho posible esta noticia. Conoces nuestra línea editorial, a contracorriente de la ideología dominante y desacomplejadamente comprometida con la dignidad humana, la unidad de España y la identidad de Europa. No es fácil ni es barato sostener un medio de comunicación que beba de estos postulados, siempre contra los más poderosos. Por eso te pedimos que nos ayudes con una aportación, que formes parte de nuestro proyecto, que ayudes a que sigamos incordiando al Poder. Puedes hacerlo de varias maneras, infórmate aquí.
