La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) cree que el comandante de Información Rubén Villalba Carnerero, detenido la pasada semana tuvo que ver con los chivatazos a Koldo García. Cuatro meses antes de ser detenido, el asesor del exministro José Luis Ábalos supo que le estaban investigando. Además, según ABC, García y Villalba se reunieron con otros tres guardias civiles en la marisquería La Chalana antes de sus detenciones.
La UCO cree que el comandante prestaba servicios a la trama del caso Koldo a cambio de un sobresueldo de 2.000 euros al mes. Cuando lo detuvieron en el aeropuerto de Barajas antes de viajar a Venezuela, donde tiene destino, llevaba 4.850 dólares en la mochila.
El pasado octubre la UCO detectó la primera conversación entre Koldo y su hermano en la que aseguraban que conocían la investigación. El primero llegaba a decir que unos agentes de la Guardia Civil iban a explicarle los seguimientos. Los hermanos se encontraban comiendo en la marisquería La Chalana, donde un rato después Koldo García y Rubén Villalba recibían a otros tres agentes.
En La Chalana llegaron a reunirse seis personas, de las que la UCO sabe que cuatro eran agentes. Aunque en ese momento no los identificó, todos fueron fotografiados. Aunque no hay pruebas de que Rubén Villalba informara de las investigaciones a Koldo ese día, en los nuevos volcados de información se han probado sus contactos con Rogelio Pujalte. Pujalte es el responsable del depósito judicial de Murcia que avisó a Koldo de que no usara Telegram.
