El juez del Tribunal Supremo ha denegado a Jordi Sánchez (JxCat) el permiso para acudir al Parlament al pleno convocado para el próximo día 12.
El pleno de investidura de Jordi Sánchez, número dos de la lista de Junts per Catalunya, se mantiene convocado para el próximo lunes a las 10.00.
Sánchez, exlíder de la ANC, no podrá asistir después de que el juez del Supremo Pablo Llarena le haya denegado la salida de prisión. El magistrado no ha esperado a la decisión de VOX, que había informado de que presentaría en el Supremo el escrito sobre Jordi Sànchez este lunes «para impedir que sea investido presidente de la Generalitat».
El juez le ha denegado acudir al Parlament al pleno convocado y también ha rechazado que salga en libertad. Previamente, la Fiscalía se había opuesto a la petición del golpista.
El Gobierno pide respeto a la decisión
El Gobierno ha pedido respeto para la decisión de Llarena y ha considerado que una persona en sus circunstancias no está en condiciones de ejercer de president.
Así se ha expresado el ministro de Educación y portavoz del Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo, en la conferencia de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. Ha reiterado que el Gobierno, ante cualquier decisión judicial, siempre expresa su respeto, tanto cuando le parecen bien como cuando pueda no estar de acuerdo. El mismo respeto ha pedido por parte de todos. «Mejor nos iría a todos si todos practicáramos el respeto y el acatamiento», ha recalcado.
A continuación ha advertido de que no se puede engañar sucesivamente a los catalanes y ha subrayado que el Gobierno considera que una persona que está en prisión provisional no está en situación de ejercer unas funciones como las que exige ser presidente de la Generalitat. «Tienen que buscar y tienen que encontrar una persona que sea capaz de ejercerlas dentro siempre de la legalidad y el orden constitucional», ha reiterado el portavoz el Ejecutivo.
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