La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha rescatado información sobre licitaciones concedidas a empresas, concretamente a Levantina, Ingeniería y Construcción SL, en el correo electrónico de Koldo García, antiguo asesor de José Luis Ábalos en el Ministerio de Transportes. Los investigadores han detectado que García disponía de datos previos sobre adjudicaciones de Adif a esta constructora, que posteriormente fueron otorgadas y ahora están bajo escrutinio.
Los correos intervenidos han revelado que García compartió detalles de al menos tres proyectos de obra pública con un tercero a través de WhatsApp antes de eliminarlos, según ha adelantado el diario Abc. Entre ellos figuraban las obras de mejora del AVE en Barcelona y Gerona por 3,8 millones de euros sin IVA; la urbanización de la Plaza de Europa en Gerona por 870.300 euros sin IVA; y la primera fase de remodelación de la estación de Sants en Barcelona, valorada en 6,5 millones de euros sin IVA. La constructora Levantina, Ingeniería y Construcción SL, participó en las tres licitaciones, pero solo obtuvo la primera, que recibió financiación de la Unión Europea.
El caso ha tomado una nueva dimensión con las declaraciones de Isabel Pardo de Vera, expresidenta de Adif, quien aseguró en el Tribunal Supremo que tanto Koldo García como José Luis Ábalos mostraron especial interés en los pagos a empresas como Levantina y Murias, beneficiarias de contratos públicos del Ministerio de Transportes. Su testimonio ha despertado sospechas, sobre todo porque fue el asesor y no el ministro quien solicitó información al respecto.
El comisionista Víctor de Aldama, investigado por delitos de corrupción y señalado como pieza clave en la trama, ha declarado ante el Alto Tribunal que varias empresas, entre ellas Levantina, habrían pagado comisiones para asegurarse la adjudicación de obras públicas. Aldama presentó un listado con 128 contratos con los que busca colaborar con la investigación y demostrar que ciertas compañías recibieron un trato preferencial antes de concurrir a los concursos públicos.
Uno de los correos electrónicos analizados por la Guardia Civil cobra especial relevancia en este contexto. En febrero del año pasado, los agentes encontraron un documento que Koldo García había enviado a su expareja, Patricia Uriz, también investigada en la causa. En el mensaje se detallaban las condiciones de licitación de tres obras de Adif cuando Ábalos dirigía Transportes. Ese mismo documento había sido enviado previamente a un contacto identificado como ‘Chema’, aunque García lo borró tras enviarlo, quedando almacenado en la bandeja de mensajes eliminados.