Aunque la cuota de mercado de Huawei en el sector de los teléfonos móviles ha caído drásticamente hasta un 3,49% en 2024, sus intereses en España van mucho más allá de la venta de dispositivos. Documentos recientes revelan una compleja trama de lobistas y conexiones con Pekín que involucran a personajes clave en el entorno del Gobierno de Pedro Sánchez.
Uno de los nombres centrales en esta red es Fangyong Du, conocido por su apoyo financiero al think tank prochino de José Luis Rodríguez Zapatero, Gate Center. Fangyong Du ha estado bajo investigación del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) debido a sus presuntos vínculos con los servicios de espionaje del régimen chino. Durante años, trabajó como asesor del principal ejecutivo de Huawei en España, Tony JinYong, y tuvo un papel clave en el acercamiento de la multinacional asiática a altos cargos del Gobierno español.
Sobornos en Europa y conexiones con Moncloa
La semana pasada, la Policía belga desmanteló una red de sobornos vinculada a Huawei en la Unión Europea. La investigación se centra en el exconsejero delegado de Huawei en España hasta 2021 y actualmente máximo directivo de la compañía en Bruselas, Tony JinYong,. Según los informes, lobistas de Huawei habrían pagado comisiones a eurodiputados para intentar levantar los vetos a su participación en el despliegue del 5G, alegando que las restricciones se deben a motivos de seguridad estratégica.
En territorio español, Huawei siguió una estrategia similar con el objetivo de consolidar su influencia sobre el Gobierno de Sánchez. Documentos revelan que Fangyong Du, tras financiar el lobby de Zapatero con 15.000 euros en 2022, trabajó en la sombra para garantizar que España se convirtiera en una base clave para los intereses de la compañía china en Europa.
En noviembre de 2020, el directivo de Huawei entregó a Fangyong Du una carta dirigida al entonces ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, según revela El Confidencial. En el documento, Tony JinYong solicitaba un encuentro personal con el ministro para «compartir los planes de inversión de la compañía en España y los objetivos de desarrollo del negocio». Huawei quería consolidarse como un actor clave en el sector digital español, justo en un momento en el que Europa y Estados Unidos daban la espalda a la empresa por sus lazos con el Partido Comunista Chino.
Para lograr este acceso directo a Moncloa, Fangyong Du recurrió al empresario vascuence Víctor de Aldama, implicado en el caso Koldo. La carta de JinYong fue hallada en los dispositivos incautados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en la operación Delorme, lo que confirma la existencia de esta intermediación.
Un contrato millonario y el Ministerio de Transportes
Tras ese primer contacto, la relación entre Fangyong Du y Aldama se intensificó. En febrero de 2021, Huawei firmó un contrato con una de las sociedades de Aldama, Deluxe Fortune SL, convirtiéndolo en consultor de la compañía. A partir de entonces, la multinacional china le pagó 10.000 euros mensuales más IVA por sus servicios.
Con la mediación de Aldama, Huawei logró introducirse en el Ministerio de Transportes, el departamento con mayor presupuesto del Gobierno. Su prioridad era que Moncloa ignorara las recomendaciones de la Unión Europea y permitiera a la compañía participar en el despliegue de redes 5G en España. Se llevaron a cabo reuniones para discutir la implantación de infraestructuras de telecomunicaciones, incluyendo proyectos en torno a los estadios de fútbol, aprovechando la influencia de Aldama como presidente del Zamora CF.
A pesar de que en 2022 la Comisión Europea instó a España a incluir a Huawei en una «lista negra» de proveedores de alto riesgo para la seguridad nacional, el Gobierno de Sánchez se ha negado sistemáticamente a hacerlo. A día de hoy, Huawei sigue operando sin restricciones en infraestructuras estratégicas del país.
Vínculos con la cúpula del PSOE
El encubrimiento de los intereses chinos no termina en el Ministerio de Transportes. Cuando en febrero de 2024 la Unión Europea exigió a España una posición clara respecto a Huawei, el entonces ministro de Transformación Digital, José Luis Escrivá, declaró públicamente: «España no tiene ninguna intención de elaborar un listado de proveedores de alto riesgo«.
A esto se suma el hecho de que la sucesora de Tony JinYong al frente de Huawei España fue Theresa Jamaa, pareja del ministro de Exteriores José Manuel Albares. En 2023, meses después de dejar su cargo en la multinacional china, Jamaa fue nombrada consejera de Hispasat, la empresa estatal responsable de las comunicaciones estratégicas españolas, incluyendo las de Defensa.
Zapatero, China y el espionaje
Mientras tanto, Fangyong Du sigue estrechamente vinculado a Zapatero, quien se ha convertido en uno de los principales promotores de la influencia china en Occidente. Tras financiar Gate Center, el socio chino del expresidente socialista ha sido colocado como asesor del Grupo de Puebla y de Dilma Rousseff, presidenta del Banco de Desarrollo de los BRICS.
El CNI advirtió de los peligros que suponía Fangyong Du para la seguridad nacional y desaconsejó concederle la nacionalidad española. La Justicia siguió estas recomendaciones y rechazó su solicitud. No obstante, sus negocios continúan adelante con el respaldo de Zapatero y su red de contactos.
Mientras países como Alemania y Reino Unido han cerrado sus puertas a Huawei por considerarla una amenaza, el Gobierno de Sánchez ha mantenido una postura complaciente con la multinacional vinculada al Partido Comunista Chino. No ha habido sanciones, no se ha elaborado una «lista negra» de proveedores de riesgo y, lo más preocupante, Huawei sigue teniendo acceso a infraestructuras críticas españolas. El espionaje y la influencia china en España no son teorías conspirativas, sino una realidad documentada que salpica directamente a la cúpula del PSOE.