La competencia desleal de productos de terceros sigue provocando serios y duros estragos a la producción agroalimentaria nacional. En esta ocasión, la entrada masiva de patatas procedentes de Egipto e Israel en los supermercados españoles ha puesto en peligro el inicio de la campaña de patata nueva en las regiones de Andalucía y Murcia.
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha declarado que como consecuencia de esta entrada masiva “el consumidor se ve obligado a hacer la típica tortilla de patata con materia prima de Oriente Medio, mientras la producción autóctona de calidad está en los sacos«.
Así, Alberto Duque, responsable del sector de la patata en COAG ha señalado que resulta incomprensible encontrar patatas israelíes, por ejemplo, en los lineales de Cartagena (Murcia). De este modo, ha hecho hincapié en la necesidad de apostar por la producción local. Una producción que ya cumple con todos los estándares necesarios y de calidad.
En este mismo sentido se ha pronunciado Rodrigo Alonso, portavoz nacional de VOX en materia de campo y trabajo: «Nuestros productores están sometidos a la asfixia del Pacto Verde Europeo y tienen que cumplir requisitos medioambientales, fitosanitarios y laborales que no cumplen los productores de Egipto o Israel. «Las políticas de Bruselas, pactadas por PP y PSOE, constituyen un serio riesgo contra la soberanía y la seguridad alimentaria y fomentan la competencia desleal que hunde a nuestros productores», ha concluido.
